Palabras como la productividad, vista desde el lado negativo, se han adentrado en la mente de las generaciones más jóvenes para llevarlos a una presión extrema que genera depresión y otros trastornos mentales que limitan su calidad de vida.
La globalización y las redes sociales trajeron consigo que compararse fuese más fácil, originando inseguridades y miedos que terminaron por transformar a la sociedad, convirtiéndonos en multitareas infelices con jóvenes que cada vez manifiestan a edades más tempranas deterioros emocionales.
La presión por el éxito en las nuevas generaciones
Las altas expectativas y el constantemente estar viendo la propia vida desde la perspectiva de los demás está llevando a los milennials y la generación Z a deprimirse.
Esto se comprueba en que para ellos, la idea de ser exitosos es ser ricos o famosos, tal como lo aseguró una investigación de la Universidad de Harvard, reseñada en La Razón, en la que estos dos ítems obtuvieron cada uno la mitad de las respuestas.
“Con la generación del milenio, donde las personas están más conectadas que cualquier otra anterior, las oportunidades para comparar niveles de éxito son omnipresentes. Surge, entonces, la creación de la ansiedad y la inseguridad”, afirma el estudio.
Es decir, en la actualidad, ver los logros de los compañeros se transforma en un espacio para examinar los propios fracasos, en especial porque son pocos los que se atreven a hablar de errores, trabajo duro, dificultades y problemas para llegar a la meta.
El alto precio a pagar: depresión y ansiedad
Por supuesto que el estar presionándose a lograr metas constantemente, superar a los demás y correr en contra del reloj pasa la factura en la salud mental.
Un análisis realizado por Bussines Insider arrojó que la depresión es mucho más común en la generación millenial, así como las muertes por desesperación, estrés económico y soledad que en otras generaciones, según el portal Dinero en imagen.
De igual manera, afirman que solo en México hay 2.5 millones de jóvenes entre 12 y 25 años que sufren de depresión.
Y eso no es todo. Una investigación comandada por Harvard Business Review concluyó que la mitad de todos los millennials y el 75% de la generación Z han tenido que renunciar por lo menos a un trabajo por temas relacionados a la salud mental, conforme con el citado medio.
La solución
Para los expertos, una de las claves para revertir este problema es cuidar la salud mental así como se atiende la salud física y buscar ayuda cuando se presentan algunos de los trastornos.
El trabajo interno y la reflexión también son muy importantes, porque hay un diálogo interno que debe prevalecer en el cual la aceptación, no confundido con conformismo, tiene que hacerse presente porque no se puede tener todo lo que se quiere o lo que se planteó.
En muchas ocasiones la vida igualmente demuestra que esto a veces ni siquiera es necesario, por lo que para muchos, practicar actividades que favorezcan el agradecimiento tiene un peso importante en su vida emocional.
“Tenemos un diálogo interno muy negativo, basado en las carencias que tenemos. Deberíamos ser más agradecidos por lo que tenemos que es muchísimo, y si tuviéramos este enfoque centrado en la gratificación haría que nuestra vida fuera diferente”, aseguró la doctora Amparo Calandín a GQ.
Las actividades recreativas son fundamentales pues ayudan a drenar las frustraciones. Hay que desconectarse y pasar tiempo fuera de casa, las universidades o el trabajo para realizar pasatiempos que se disfruten y acumular experiencias gratificantes.
Más de este tema:
Lidiar con una persona pasivo agresiva puede acabar con tu energía y es momento de alejarte
Cambiar de carrera o profesión no es un fracaso: lo que debes saber antes de dar el salto
Consejos para dejar de quejarte por todo y alejar las malas energías de tu vida
Te recomendamos en video:
This browser does not support the video element.
