Qatar 2022: cuando casi latigan a mexicana por denunciar violación de periodista colombiano

Faltan pocos días para que se dé inicio al torneo de la Copa Mundial de la FIFA 2022, y esta edición ha sido motivo de desconcierto y vergüenza desde hace años, cuando se anunció que la sede de esta celebración deportiva se daría en uno de los territorios más inhumanos que existen en pleno siglo XXI: Qatar.

Las polémicas que han rodeado a este mundial van desde maltrato y explotación laboral hacia los constructores de todas las infraestructuras que se necesitaban para antes de que el torneo diera inicio, hasta el rechazo de todos los aficionados, pues el país se encuentra en uno de los territorios con las peores condiciones posibles para las mujeres y la población diversa.

Se presume que las construcciones de los magníficos estadios especialmente diseñados para esté evento, y la elección de Qatar como el lugar de esta edición del Mundial, en un país donde no se juega futbol, estuvieron manchadas de corrupción por donde se le mire, y de los 12 que se habían prometido levantar, solo llegaron a 8.

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Qatar es un territorio abusivo y extremista. Las mujeres son nadie en esas tierras, y además de esa polémica se le sumaron dos atroces hechos en contra de mujeres: en Irán, una mujer de 22 años llamada Mahsa Amini murió en manos de la policía por “usar mal el velo”.

La otra polémica se dio en el año 2021, cuando una periodista mexicana denunció haber sido violada por un colega colombiano, y ante esto su denuncia fue usada en su contra, siendo procesada y casi latigada y condenada, todo por culpa de la pésima asesoría que recibió de su consul cuando ella acudió por instancias legales.

¿En que quedó el caso de la periodista mexicana?

Primero hay que dar contexto del suceso: Paola Schietekat, periodista mexicana llegó a Doha en febrero del año 2020 para trabajar junto al gobierno de Qatar en la organización de la Copa del Mundo de la FIFA Qatar 2022. Todo bien hasta que después de llevar un año y medio viviendo ahí, conto que fue víctima de una agresión por parte de un colegia colombiano.

Al acudir a las autoridades para denunciar al sujeto y gracias a la maña asesoría del canciller que la atendió, el caso se fue en su contra, siendo acusada de “sexo extramarital”, un delito de la ley islámica sharía. A Paola se le impuso una condena de 7 años de prisión y 100 latigazos. Como alternativa, le dijeron que podía evitar esa pena si se contraía matrimonio con su agresor.

“Después de este proceso, caí en cuenta de que, a pesar de mis grados académicos, preparación profesional, independencia financiera y a pesar de trabajar para el gobierno qatarí, soy vulnerable a las violaciones de derechos humanos de instituciones arcaicas y abusivas, e incapaz de encontrar protección en mi consulado”, ´dijo Schietekat por medio de una publicación de Facebook en la que contó lo ocurrido.

SI bien la mujer pudo salir de Qatar el año pasado, afirma que no se ha hecho justicia en su caso y que su agresor sigue libre, y advierte que las mujeres y las personas LGBT que deseen visitar ese lugar por esta ‘celebración’ deportiva, corren altas probabilidades de ser víctimas del sistema qatarí.

En abril, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) mexicana anunció el pasado mes de abril que “Qatar había cerrado el proceso penal contra Schietekat después de que el juez tomara en consideración los argumentos de la defensa.”, afirmaron en su comunicado de prensa.

Aun así, la periodista hizo la aclaración de que el caso sigue abierto y todavía existe una acusación en contra de ella por parte de la Fiscalía.

Como forma de protesta y rechazo ante todos estos hechos, se han armado boicots en Francia para no poner pantallas gigantes ni mostrar los partidos de fútbol en lugares públicos de París, Marsella, Burdeos, Estrasburgo, Lille, entre otras ciudades.