El 7 de mayo Julissa se encontraba en su casa con su «mejor amigo» Pablo cuando este la apuñaló 26 veces para después encerrarla en el baño y prender fuego a su domicilio. Según los testigos, tenía un rasguño en la cara pero dijo que había sido asaltado esa noche. Desde entonces no se sabe nada de su paradero.
Julissa tenía 15 años y era estudiante de secundaria. De acuerdo con reportes de medios locales, había fallecido calcinada dentro de su vivienda en Villa de Álvarez. El domingo 9 de mayo, colectivos feministas y usuarios de redes sociales difundieron que el incendio habría sido provocado y que la joven habría sido herida por presuntamente uno de sus compañeros de la escuela.
Ahora jóvenes marcharon por segundo día consecutivo por las calles de Colima exigiendo justicia por el feminicidio de la joven. Las movilizaciones, organizadas por el colectivo Amigas y amigos de Julissa, marcharon por Piedra Lisa rumbo a la Casa de Gobierno, llegaron a la Glorieta del Rey de Colimán y continuaron hacia el Palacio de Gobierno.
“¡No fue un accidente, fue feminicidio!”, “¡Alto a los feminicidios en el estado de Colima!”, gritaban los manifestantes.
Tanto Julissa como el presunto agresor son menores de edad por lo que la Fiscalía General del Estado (FGE) tiene que seguir un procedimiento distinto a cuando el presunto culpable es mayor de 18 años.
Peritos concluyeron que el incendio fue provocado y que en la escena del crimen, la posición y las marcas en el cuerpo de Julissa daban indicios de que había tratado de defenderse.
En México las mujeres somos blanco de agresiones todos los días y no hay justicia
Mientras que amigos y familiares exigen justicia por Julissa, otro caso que sigue impune es el de Monse Bendimes, una joven que falleció luego de estar 6 días en coma por los golpes que su novio Marlon le propició.
Tenía 20 años y estudiaba ingeniería en Boca del Río, Veracruz, de donde era originaria. Fue desconectada luego de que le declararan muerte cerebral. Según el reporte médico, tenía fractura de cráneo, cuello y un brazo.
De acuerdo con el reporte, el sábado 17 de abril Marlon Botas Fuentes visitó a Monse en su domicilio ubicado en la calle Alfonsina Corro del Puerto de Veracruz. Sus padres no se encontraban en casa pero cuando regresaron la encontraron golpeada y ensangrentada.
Marlon ‘N’ y su familia están prófugos de la justicia.
Durante días, la fotografía de Marlon circuló en redes sociales mostrando las diferentes formas en las que podría verse en caso de ser visto.
La familia de Monse sospecha que Marlon pudo haber salido del país con la ayuda de su familia, puesto que de un día a otro cerraron las taquerías de las que son dueños en Veracruz. Además, no han sido localizados en su domicilio y cerraron sus cuentas en redes sociales.
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