Wellness

Perdonar tu pasado te hace una mujer fuerte y de espíritu libre

Una mujer fuerte sabe que no puede quedarse estancada en su pasado, ni se lamenta por lo que no pudo ser en ese momento

Lo sé. cuando el mundo está en crisis se vuelve complicado no sentirte temerosa y frágil, como si todo a tu alrededor se derrumbase. Una parte de ti quiere sentirse bien porque has avanzado y construido grandes cosas pero la otra no deja de pensar en los errores que cometiste en el pasado.

Sin darte cuenta terminas atrapada en un ciclo vicioso que te estanca y no deja a tu «mejor yo» salir a flote.

A veces nos sentimos demasiado pequeñas y vulnerables, incapaces de enfrentar los obstáculos que aparecen en el camino. Es entonces cuando olvidamos nuestra fuerza y dudamos de nosotras. haciendo que todo se vea más complicado de lo que en realidad es.

La clave está en soltar el pasado y perdonarte.

Has luchado mucho contra tus propios demonios y es normal que te sientas agotada pero créeme cuando te digo que has logrado mucho más de lo que piensas. Aprende a soltar el pasado y enfócate en lo que has logrado ahora.

Una cosa que nos hace tan humanos es nuestra capacidad para sentir dolor. Ya sea que ese dolor sea físico o emocional, todos hemos sido heridos en algún punto de nuestra vida. Sin embargo, lo que nos separa es cómo lidiamos con ese dolor.

Superar el dolor y soltar es necesario de crecer pero mientras que se dice fácil, hacerlo se vuelve una odisea.

Una de las mejores formas de curar esas heridas es aprender a dejar de pensar en el «hubiera» porque ya pasó y por más que quisiéramos no se puede volver el tiempo atrás. para cambiar las cosas.

Sé amable contigo misma. Eres una mujer fuerte por el simple hecho de estar intentando salir de ese dolor. Ahora es momento de deshacerte de esas ataduras y el primer paso es perdonándote por lo que no pudo ser.

Date permiso de sentirte mal, de enojarte y de llorar pero no te permitas quedarte ahí. Habla de tus emociones, rodéate de personas que te hagan brillar.

Cuando eres consciente de ti misma, puedes ser más responsable de tus acciones porque puedes verte en un contexto realista. Esto te ayuda a encontrar soluciones en vez de estancarte, de buscar la forma de sanar en lugar de hacer la herida más grande.

Quizá tu corazón ha pasado por demasiado dolor,  tanto que ahora te sientes sin rumbo, confundida y cansada. Sin embargo, has sido capaz una y otra vez de recoger los pedazos y volverlos a unir para ser feliz.

Todos conocemos la decepción, la sensación de un corazón roto y la ira que provoca una traición por la espalda pero cuando perdonas a quien te hizo daño y te perdonas por haber cedido, te vuelves más fuerte.

El perdón te ayuda a sanar y a superar. Si te aferras a las heridas del pasado, te quedas con el amargo sabor del rencor.En cambio, cuando aprendes a perdonar, aún sin que te lo pidan primero, tu alma se vuelve más fuerte. Deja de culparte por tu pasado, por haber tambaleado. Perdónate por esas malas decisiones, por no haber salido «a tiempo» de una mala situación o por haber dudado de ti.

Es hora de mostrar un poco de bondad y compasión hacia ti misma. El perdón es poderoso y demuestra que estás dispuesta a seguir adelante sin ese peso que por mucho tiempo cargaste,

El dolor es inevitable y sanar tomar tiempo sin embargo, siempre puedes optar por ser más amable contigo misma.

Más de este tema

Me pido perdón por las veces que no creí en mis propios logros

Las mujeres que disfrutan observar la luna son las almas más sabias

10 metas de vida que debes cumplir antes de los 35 años

Te recomendamos en video

This browser does not support the video element.

Síguenos en Google News:Google News

Contenido Patrocinado

Lo Último