Toda la vida fui de las personas que, en cuanto me planteabas la idea de una relación a distancia, me reía y pensaba “claro que no”. Ahora, estoy aquí, a varios kilómetros de él –no muchos la verdad—contradiciendo todo lo que dije a mis amigos y conocidos que estuvieron en la misma situación. Una relación a distancia no es tan complicado como lo creí.
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Eso, claro, depende de varios factores; el más importante es el modelo de relación que tengas en ese momento. Cuando tu validación como persona depende de lo que él o ella opina de ti, todo se complica. En cambio, cuando no hay una necesidad de tenerse siempre y pueden sobrevivir uno sin el otro, el futuro es muy prometedor.
Si algo se ha comprobado, es que la verdadera razón por la que una relación a distancia no funciona, no tiene que ver tanto con los kilómetros, sino con el prejuicio que automáticamente adoptamos de que va a ser caótico.
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No importa si es temporal o permanente, una relación a distancia tiene picos complicados, pero son esos en donde se pone a prueba qué tan preparados están para ello o si de plano es mejor cortar por lo sano. ¿Qué piensan las personas que lo han logrado?
- Se reservan su opinión respecto a las relaciones a distancia. Es decir, no se atreven a asegurar si funcionan o no hasta que lo vivan.
- Están abiertos a experimentar y ver qué pasa si deciden mantenerse lejos.
- Tienen plena confianza en sí mismos y en los sentimientos de la otra persona.
- No viven bajo el temor del fracaso en la pareja ni con paranoias inmaduras.
- Se ocupan de cumplir con horarios y llamadas.
- Son bastante detallistas en la comunicación para no dejar espacios a dudas o a ideas vagas sobre lo que hace el otro.
- Tienden a concentrarse en las cosas positivas de la relación y no en las discusiones.
- Cuando se ven aprovechan al máximo su tiempo en compartir momentos positivos y que los ayuden a seguir pensando que eso es una buena idea.
- Sin ocultar las emociones, tratan de mostrar la mejor parte de cada uno durante las llamadas y visitas.
- A pesar de lo que se dice, idealizar a la pareja en la distancia es positivo para mantener una postura sana respecto al otro.
- Son muy abiertos en cuanto a lo que sienten y piensan.
- Si discuten, tienen la habilidad de resolver rápido el conflicto en lugar de darle vueltas por mucho tiempo.
Todo depende del perfil de la persona que esté viviendo la experiencia. Me atrevería a decir que algunos definitivamente no están preparados para separarse, sobre todo si eres una persona que constantemente sufre ataques de ansiedad, pánico o soledad. Tampoco lo recomiendo para personas que son demasiado apegadas a las personas o que dependen mucho del otro para hacer su vida.
Si ya estás en eso, trabajen mucho en su comunicación, y al final del día piensen que si no quisieran estar juntos, definitivamente ya estarían solteros.