Tras un eclipse de Sol, siempre llega un eclipse de Luna y este 28 de octubre el mundo será testigo de este fenómeno que, según los expertos en Astrología, la Luna se encuentra en su signo de exaltación y brindará abundancia en sus manifestaciones.
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Por siglos, los eclipses son fenómenos muy temidos. Los chinos, creían que un dragón se devoraba al Sol y enviaban a sus soldados a tirar flechas encendidas para que el luminar no se apague.
En la cultura nórdica, los eclipses estaban arraigados a una serie de leyendas del orden de lo divino. Para muchas personas, un eclipse solar generaba miedo y pensaban que el mundo se acabaría o que se avecinaba un terrible suceso apocalíptico.
De acuerdo a la creencia, los dioses encadenaron a un malvado hechicero llamado Loki. El aprisionado, enojado por lo que le ocurrió, se vengó y creó gigantes con aspecto de lobo. Uno de ellos se tragó al Sol y provocó un eclipse. Otro de estos animales persiguió a la Luna, intentó comérsela, y dio origen a los eclipses lunares, reseñó el portal National Geographic.
El eclipse de Sol, eclipsa, oscurece y produce la desaparición temporaria del luminar eclipsado. Un eclipse Lunar siempre es una Luna llena y usualmente marca finalizaciones, situaciones culminantes o aquellas en la que se nos fuerza a comprobar nuestro pasado (Luna) a la luz de la experiencia actual.
¿Momentos para escondernos?
Los astrólogos relacionan este fenómeno con confusión y momentos particularmente propicios para esconder, ocultar, fomentar o expandir “sombras” de manifestación emocional.
En los eclipses de Luna es la Tierra la que proyecta su sombra sobre la Luna y nuestras emociones y sentimientos pueden desbordarse hasta un punto de ser percibidos claramente por los demás.
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También se presentan momentos de alteración, desorden, desconcierto o confusión, un sentimiento teñido de nostalgia o pesimismo por cosas de la vida que uno siente que está dejando atrás, y, lo que parece ser, en realidad no es.
Los eclipses, que oscurecen aún más la noche, tergiversan las emociones que pueden pasar por un momento de mayor confusión.
Qué va a suceder con el eclipse lunar del 28 de octubre
La Luna Llena entra en la casa de Tauro el 28 de octubre, el mismo día que ocurre el eclipse lunar. Pero al mismo tiempo se produce la oposición de Marte con Júpiter y éste será el primer aspecto que haga la luna eclipsada después de separarse de la oposición con el Sol.
Según El Clarín, Marte está muy fuerte en domicilio y Júpiter, retrogradando, se encuentra en Tauro, un signo también asociado a la economía, a lo material.
Al estar estos dos planetas confrontados desde signos opuestos indican que hay tensión, conflictos, luchas, problemas con las leyes, la justicia o la economía.
Marte, el planeta de la acción, de la lucha, de la guerra, se encuentra en su propio domicilio sumamente “empoderado”.
Esto afectará en forma tensional a quienes tengan puntos sensibles como son los signos Fijos: Tauro, Leo, Escorpio y Acuario.
Esto puede sincronizar con serios conflictos con otras personas y riesgos de accidentes, incluso sentirse frustrados, enojados, resentidos, de mal humor.
Los cambios también son positivos
Urano está en Tauro y en movimiento retrógrado, afectando a esos signos con puntos sensibles. Sin embargo, como ese es el planeta de las sorpresas hay una energía que moviliza a su paso los cambios, especialmente aquellos rápidos e imprevistos.
Hay necesidad de libertad, de rebeldía y de lo no convencional, pero el transito de Urano ayuda a despertar y a conectar con la intuición y con el deseo de quebrar estructura e iniciar un nuevo camino.
Es un acelerador de acontecimientos y pensamientos, da brillo intelectual, innovación cultural y tecnológica, y se asocia a la inventiva y la originalidad.
