Ángela Aguilar está dando mucho de qué hablar… otra vez. Pero esta vez no es por una canción, ni por un escándalo nuevo, sino por la forma tan calculada, según muchos internautas, en la que estaría intentando recomponer su imagen pública tras los cuestionamientos que ha generado su relación con Christian Nodal.
La estrategia de Ángela Aguilar para limpiar su imagen
En su reciente aparición en el programa Ventaneando, Ángela Aguilar habló con un tono sereno, vestida en colores suaves, maquillaje glam y peinado con ondas largas y elegantes. La escena fue un contraste total respecto a la última vez que se enfrentó a las cámaras con declaraciones como aquella que encendió a las redes: que el amor con Nodal “siempre estuvo ahí” y que “todas las partes estaban de acuerdo” en alusión a Cazzu, la ex del cantante y madre de su hija.
Ahora, el mensaje es otro: más suave, más familiar y más humano. “No le voy a decir que no ha sido difícil porque soy un ser humano, tengo 21 años, estoy viviendo una nueva etapa en mi vida que para mí eso tiene muchos miedos, muchas ilusiones, como que muchos golpes de realidad también de lo que implica estar en donde yo estoy parada”, expresó Ángela con franqueza. Y agregó: “Aún viviendo entre tanta crueldad, entre tanto ruido, lo más bonito que yo siempre he tenido, que ahora lo aprecio aún más, es la familia. Respaldarme mucho en la gente que me levanta, me hace más grande y guardar silencio y yo no puedo reclamar nada a nadie, yo vivo muy feliz.”
Una respuesta que, aunque intenta conectar con la audiencia desde la vulnerabilidad, ha sido percibida por muchos como parte de una narrativa diseñada para recuperar simpatía.
¿Cambio real o estrategia de marketing?
Con el lanzamiento de su nuevo álbum, muchas personas en redes coinciden en que esta ronda de entrevistas forma parte de una campaña para reconectar con el público. Algunos comentarios irónicos en TikTok lo resumen así: “Nos cambiaron a la Ángela Aguilar. Ahora habla suave, se viste de pastel y quiere parecer la única reina del regional mexicano”.
Aunque el cambio puede ser genuino y formar parte de su maduración, para muchos, Ángela sigue siendo la joven que, según ellos, “habló de quien no debía y no supo manejar su historia de amor”. Por eso, por más que suavice su voz, vista en tonos pastel o diga que “vive muy feliz”, hay quienes simplemente no le creen.
“Todo el mundo me dijo que era el equivocado, excepto mi familia”
En la misma entrevista con Pati Chapoy, Ángela tocó un tema sensible: las críticas hacia su relación con Nodal. “Creo que todo el mundo me dijo que era el equivocado, excepto en mi familia, ellos no”. Esta frase dejó entrever que, aunque la presión social ha sido intensa, su entorno cercano ha sido su refugio emocional.
Y justamente eso, el refugio en la familia, ha sido el nuevo eje de sus declaraciones públicas. En lugar de hablar de su amor con Nodal como una historia apasionada que venció obstáculos, ahora lo presenta como una historia íntima, serena y familiar. El cambio no ha pasado desapercibido para los usuarios de redes sociales, quienes han notado que en las últimas semanas Ángela ha ofrecido al menos tres entrevistas en las que repite esta nueva narrativa con la misma estética dulce y tono apacible.
Pero lo que más llamó la atención fue cuando habló sobre su cambio físico. “¡Estás delgadísima!”, le dijo Chapoy. Ángela respondió: “Yo creo que fue por mucho estrés y ansiedad. Bajé como 10 kilos en un mes”.
La confesión generó reacciones divididas: algunos empatizaron con la presión que vive una joven de 21 años expuesta a la opinión pública, mientras otros consideraron que todo formaba parte de un media training bien ejecutado.