Las producciones de true crime han conquistado nos han conquistado por su capacidad de sumergirnos en los aspectos más oscuros de la naturaleza humana. Desde as3sinat0s hasta conspiraciones y desapariciones misteriosas, estas historias nos enganchan y despiertan nuestra curiosidad.
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Aunque a veces estos casos pueden ponernos los nervios de punta al recordarnos que son parte de nuestra realidad, cuentan historias que nos permiten adentrarnos en la mente criminal y explorar los motivos y las acciones detrás de los crímenes más atroces.
Además, nos muestran el lado desconocido de la investigación forense y cómo puede llevar a la resolución de casos que parecían imposibles de resolver o bien, también puede dejar al descubierto los fallos en el sistema.
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Es así como en Netflix, un nuevo documental ha acaparado la atención de todos, ganando un merecido puesto en el TOP 10 semanal en la plataforma. Se trata de ‘What Jennifer Did’ y promete atraparte desde el primer minuto.
Este es el documental más popular que verás esta semana en Netflix
Durante una hora y media, la directora Jenny Popwell (quien ya se ha hecho cargo de otras producciones del género como ‘American Murder: The Family Next Door’, también de Netflix) explica el terror que se vivió en un pequeño pueblo canadiense, cuando una joven llamada Jennifer Pan llamó a la policía relatando cómo sus padres estaban siendo atacados por intrusos en su casa.
Los hechos ocurrieron el 8 de noviembre de 2010 y a través de entrevistas a vecinos y policías, así como de imágenes y material de archivo, el documental nos lleva por los acontecimientos que condujeron a esa fatídica noche. A medida que avanza el documental, conocemos a Jennifer, quien siempre vivió bajo las rigurosas normas de sus padres, entre lecciones de piano y patinaje sobre hielo y el sueño fallido de convertirse en médico. Esto llevó a que las investigaciones la apuntaran como principal sospechosa de ser la mente maestra detrás del crímen.
El perturbador caso de Jennifer Pan
El caso de Jennifer Pan ha conmocionado al mundo con su complejidad y tragedia. Pan era una estudiante de ascendencia vietnamita-canadiense que vivía con sus padres en Ontario, Canadá. Aparentemente, tenía una vida normal: una familia amorosa, buenas calificaciones en la escuela y aspiraciones académicas. Sin embargo, detrás de esa fachada de normalidad había una gran infelicidad y frustración.
Y es que sus padres restringían su vida social, impidiéndole asistir a fiestas o tener citas, lo que la llevó a entablar una relación romántica en secreto con su compañero de la escuela Daniel (que también era un traficante de drogas que trabajaba en una pizzería). Al descubrirla, le prohibieron rotundamente seguir con él, lo que habría desatado en Jennifer el deseo de as3sinarl0s.
La joven recurrió a Daniel, quien la ayudó a organizar el asesinato a través de su contacto, conocido en el documental como “Homeboy”. Jennifer afirma haber pagado 10.000 dólares canadienses para que tres intrusos organizaran un robo y dispararan y mataran a sus padres. Según ella misma relata, se comunicó con los asesinos a través de mensajes de texto y abrió la puerta de la casa para que cumplieran con su objetivo.
Los sujetos dispararon, matando a su madre y dejando gravemente herido a su padre. Jennifer alegó haber sido víctima del robo y el as3sinat0, pero las investigaciones policiales revelaron la verdad sobre su participación en el crimen.
Jennifer fue arrestada pero se declaró inocente en el juicio, que comenzó en marzo de 2014 y duró 10 meses. Fue juzgada junto a sus cómplices: su exnovio Daniel Chi-Kwong Wong y dos de los presuntos sicarios, Lenford Roy Crawford (alias “Homeboy”) y David Mylvaganam.
La Policía Regional de York presentó más de 200 pruebas, incluidos mensajes de texto que Jennifer y Daniel intercambiaron en las seis horas previas al asesinato. Asismimo obtuvieron más de 50 testigos que llevó a que el jurado declarara culpables a los cuatro sujetos en primer grado, intento de asesinat0 y conspiración. Todos fueron condenados a cadena perpetua, sin posibilidad de libertad condicional durante 25 años.