La película Fabricante de lágrimas ha logrado conquistar por completo los corazones de las audiencias en el mundo con una historia de amor y resiliencia desde su reciente estreno en Netflix.
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Encabezada por Simone Baldasseroni y Caterina Ferioli, la producción sigue a Nica y Rigel, dos adolescentes que descubren sus sentimientos por el otro tras ser adoptados de un terrible orfanato.
A causa de lo verosímil y universal de algunos hechos de la trama, muchos se preguntan si la producción italiana pudiera estar basada o inspirada total o parcialmente en hechos de la vida real.
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¿Fabricante de lágrimas está inspirada en una historia real?
La respuesta es no, Fabricante de lágrimas no está basada en una historia real. La película de Netflix en realidad es una adaptación de la novela de dark romance homónima de Erin Doom.
La autora italiana, quien escribe bajo un seudónimo, empezó a compartir la historia en Wattpad bajo el usuario DreamsEater en el año 2018. El relato se hizo velozmente popular entre los usuarios.
Incluso ganó un premio en la categoría romance de los Watty Awards, entregados por la plataforma, en el año 2019. El éxito del relato llamó la atención de Adriano Salani Editore que lo publicó en 2021.
El libro, el primero de la escritora, se convirtió en un bestseller número uno en Italia con más de medio millón de copias vendidas. Además, se hizo viral en la comunidad de BookTok en TikTok.
Desde entonces, Fabricante de lágrimas se ha traducido a 26 idiomas. Asimismo, por el hecho de usar un seudónimo, Doom –quien estudió Derecho– llegó a ser comparada con Elena Ferrante.
De acuerdo al cibersitio The Cinemaholic, la escritora tuvo por primera vez la idea de escribir la historia de los jóvenes Nica y Rigel mientras estudiaba sobre las leyes de adopción y acogida.
En su investigación, leyó relatos de personas que tuvieron experiencias traumáticas en orfanatos y se quedó perpleja al descubrir cómo esos lugares se volvieron opresivos por sus responsables.
No obstante, en los testimonios, también se sorprendió ante el amor y el apoyo que los niños se daban entre sí y cómo permanecían firmes ante todas las adversidades que sufrían a diario.
Mientras pensaba en este escenario, ideó el Orfanato Sunnycreek de su novela debut. Al crear a Margaret, la responsable del orfelinato, pensó en alguien que traumatizara mucho a los niños.
Fabricante de lágrimas puede verse en Netflix desde el pasado 4 de abril.