El nombre de Sarah Rose Hanbury vuelve a sonar muy fuerte en los distintos medios de comunicación, al ser la mujer con la que vinculan sentimentalmente con el príncipe William, desde hace unos años atrás. La relación extramarital estaría dejando a Kate Middleton en la misma situación que vivió la princesa Diana con el ahora Rey Carlos III.
PUBLICIDAD
Y es que el día de San Valentín aumentó las especulaciones, luego que Kate asegurara que no esperaba ningún detalle por parte de su esposo pues había dejado de hacerlo desde hace tiempo atrás. Ante ello muchos aseguraron que la pareja no pasó el día del amor juntos.
Hanbury es una exmodelo y esposa del marqués David Cholmondeley y habría sido con ella con quien pasó San Valentín y a quien presuntamente le regaló un costoso collar de diamantes.
El parecido de la amante de William con Kate Middleton
Rose es conocida dentro de la realeza al punto de haber sido amiga de Middleton, amistad que se quedó fracturada tras los primeros rumores de romance con su esposo en 2019, cuando fueron captados bailando en un club nocturno.
- Te recomendamos: Kate Middleton: una vida entre sonrisas y sufrimiento, al aceptar engaños y maltratos por la Corona
La mujer ha sido comparada con la reina consorte Camila Parker, pues ella fue la amante del rey Carlos cuando este estaba casado con la madre de sus hijos. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención es el gran parecido que guarda la exmodelo con la nueva princesa de Gales.
Y es que ambas llegaron a estar juntas en distintos eventos y obras benéficas de la realeza donde quedaba al descubierto que guardan algunas similitudes tanto en rasgos físicos como en estilo y para muchos parece el clon de la esposa del heredero a la Corona.
Pese a ello, distintos internautas consideran que Kate es mucho más guapa y no contemplan como William ha podido engañar a su esposa, que es toda una dama y brilla con su belleza en cada una de las alfombras rojas en las que aparecen.
Así lo hizo durante su última aparición con su esposo en los Premios BAFTA donde ambos intentaron acabar con los rumores con sus gestos de cariño y complicidad, aunque no lograron su cometido, pues la amenaza de pruebas de tal infedelidad amenazan a la corona.