Aparte de sus entrañables protagonistas, Hasta que la plata nos separe estuvo colmada de personajes que marcaron al público. Entre estos, uno de los más recordados es Edgar Marino.
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En la exitosa telenovela colombiana, estrenada en el año 2006, “Marino” era el mejor vendedor del concesionario Colombiautos hasta la llegada del protagonista, Rafael Méndez, a la empresa.
A causa de esto, el egocéntrico y envidioso vendedor dispuesto a pasar por encima de sus compañeros para alcanzar el éxito odia al héroe de la trama y se convierte en su archienemigo.
Detrás de este inolvidable personaje estuvo más que cabal el famoso actor Ernesto Benjumea. En aquel tiempo, ya era toda una reconocida estrella en su Colombia natal.
Desde entonces, han transcurrido más de tres lustros en las que mucho ha pasado en la vida personal y profesional del talentoso hermano de Marcela Benjumea.
El aspecto actual de Marino de Hasta que la plata nos separe
En la actualidad, Ernesto tiene 55 años de edad, los cambios que llegan con el paso del tiempo le han sentado de maravilla y continúa brillando en el mundo de la actuación.
Tras su impecable desempeño en Hasta que la plata nos separe, el hijo del veterano actor Carlos Benjumea continuó imparable desplegando sus alas artísticas en todos los escenarios posibles.
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En la televisión, desde la última vez que dio vida a Marino, el histrión ha encarnado toda clase de personajes en 21 producciones en total, de acuerdo a su perfil en Imdb.
Bolívar (2019), Operación Pacífico (2020), Emma Reyes, la huella de la infancia (2021) y El Cartel de los Sapos: el origen (2021) son algunos de los últimos proyectos en los que ha actuado.
Por otro lado, en el cine, ha formado parte del elenco de varias películas tras el final de Hasta que la plata nos separe, como Gordo, calvo y bajito (2012) y Uno al año no hace daño (2014).
Mientras, sobre las tablas del teatro, ha brillado como actor y director en un sinnúmero de puestas en escenas, como La invitación, Hierba mala, Fe de erratas y Domingo, por citar algunas.
En cuanto a su vida personal, el eterno Marino de Hasta que la plata nos separe está muy enamorado de su esposa, la también actriz Katherine Vélez, con quien lleva más de 20 años casado.
Junto a su amada, el premiado intérprete colombiano además tiene dos hijos que los llenan de puras satisfacciones y alegrías: los jóvenes Antonia y Mateo.
