Manolo Caro cuenta su experiencia
El éxito que ha tenido ‘La Casa de las Flores’ ha sido abrumador, y a todos ha dejado encantado. Muchos la critican por ser una novela y otros la alaban por romper con los estereotipos de los temas que son tabúes en México.
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A sus 33 años, Manolo Caro ha logrado posicionar varios de sus productos en Netflix y la mayoría ha tenido un gran recibimiento por parte del público. Al parecer, se está convirtiendo en una promesa por su talento y sencillez.
Muchos comenzaron a comparar este nuevo proyecto con el pasado boom de Luis Miguel. Sin embargo, él dejó muy claro que va más allá de las comparaciones y tiene como objetivo encontrar su propia audiencia.
“No se trata de tener más éxito o no, yo creo que cada proyecto tiene su público, cada proyecto encuentra a su audiencia, yo soy el primero en aplaudir el éxito logrado por Beto Hinojosa, fue el director de bioserie de Luis Miguel y Diego Boneta, es otro amigo, eso se deja a un lado”.
Cuenta sus mayores expectativas sobre la serie
“Espero que con mucho cariño la arrope la audiencia, que se dejen enamorar, se dejen envolver por la familia y que se rían mucho”.
Algo que ha logrado porque en su mayoría se ha alabado la serie mexicana y más por parte de la audiencia juvenil, que ha replicado frases de la serie, las ha comentado y ha extendido sus felicitaciones a través de redes sociales.
Contó sobre los problemas que tuvo Verónica Castro
Nada grave, más bien fue el enfrentamiento que la actriz tuvo para salirse de su yo conservador. La matriarca de la familia es protectora, vengativa, poderosa, y le gusta fumar marihuana de vez en cuando.
Esto causó mucho conflicto en la personalidad conservadora de Verónica, pero al final se adaptó y terminó encantando a sus compañeros y al público en general.
“Pero una vez que lo hablamos y llegamos a un acuerdo fue muy divertido, nos reíamos mucho porque Virginia de la Mora, su personaje, es una mujer caótica y muy especial y Verónica era la mejor para interpretarlo”, describió.
La serie rompe con tabúes, habla de situaciones reales y quiebra los paradigmas conservadores que definen a la cultura mexicana.
“Sí, se trata de darle visibilidad a temas que pareciera que no existen en nuestras vidas y dignificarlos, eso es lo más importante, lo que nos interesa a nosotros como creativos, puede ser la infidelidad, el homosexualismo, la pasión, la traición, el amor y los secretos muy escondidos”, señaló Manolo Caro.