Si, Carulla y la cadena de supermercados D1 son dos polos opuestos si de apelar a diversos estratos socioeconómicos se trata, pues a pesar de que ambas cadenas cumplen con la misma función de abastecer las canastas familiares de los colombianos, la experiencia de compra y la selección de marcas y productos son completamente distintas.
Desde los licores hasta los artículos de aseo, los precios de Carulla en comparación con el D1 son superiores, y si, puede que se esté pagando por un alimento de ‘mayor calidad’ y por eso el precio, pero muchas veces el pagar un valor alto por un producto no siempre significara estar adquiriendo la mejor calidad allí afuera.
Si bien en Carulla la calidad es innegable, el D1 no se queda atrás si de excelentes productos se trata, demostrando que la calidad muchas veces no equivale a precios exorbitantes.
Algunos artículos que el D1 puede jactarse en tener y Carulla no
Uno de los productos más queridos de la cadena de supermercados D1 es el vino y lo mejor, su selección nunca sobrepasa los 25 mil pesos. La calidad de este lo ha convertido en uno de los favoritos no solo por su bajo precio, también por la calidad de este.
Los productos de aseo fueron los que ayudaron a posicionar a la cadena de supermercados como una ganadora. Se sabe que esta categoría de productos suele ser de las más costosas a la hora de ir a mercar, pero D1 sorprendió con sus propuestas que no solo superan en calidad a las marcas de aseo tradicionales, sino que el costo total saldría casi que por una fracción del precio que se pagaría en un establecimiento como Carulla.
Otra categoría que suele ser elevada en costo es la de los frutos secos, como las nueces, almendras, o los pistachos. Supermercado al que se entre a adquirir estos alimentos suele llevarse una sorpresa al ver el precio a pagar, pero no es el caso del D1. Sus precios aptos para todos permiten que los colombianos puedan poseer variedad de alimentos con estos en sus despensas.
Así que, si no se le ha dado una oportunidad a la cadena del D1, este es el momento. Muchas veces la calidad no equivale al valor que se paga por un artículo, existiendo una amplia variedad dentro de esas mismas gamas.