Desde la llegada de Kim Kardashian llegar a la Met Gala de este año se ha vuelto a abrir la conversación en torno al poder que tiene frente a las masas sobre la imagen corporal.
Si bien la empresaria fue criticada por haber arruinado el icónico vestido que Marilyn Monroe usó para cantarle “Feliz cumpleaños” al presidente John F. Kennedy en 1962, también fue señalada por “promover estándares corporales poco saludables” al hablar con tanta naturalidad de cómo bajó de peso para poder entrar en un vestido mucho más pequeño de sus tallas reales.
Kim Kardashian con el vestido de Marilyn Monroe, con un valor de 5 millones de dólares #MetGala pic.twitter.com/2Ga3LaAOJZ
— Johana (@Johanacarroza03) May 3, 2022
“Tuve esta idea de ponérmelo y probármelo, y vinieron con guardias armados y guantes. Me lo probé y no me quedaba bien, así que los miré y dije que me dieran unas tres semanas, y tuve que perder 7 kilos para poder encajar esto“, dijo en la alfombra roja. “Fue un gran desafío, estaba decidida a entrar”.
Desde entonces se le ha visto mucho más delgada, sumado a que decidió retirarse los implantes de seno, lo que cambió por completo su físico. Kim apareció en el Late Show de James Corden en donde lució un escotado vestido plateado que dejó al descubierto sus senos reducidos.
Pero no sólo ella ha encendido preocupación en torno a la reducción de tallas pues su hermana Khloé también luce mucho más delgada. Considerando que las Kardashian se hicieron cargo de traer de vuela los cuerpos voluminosos a la industria y que incluyeron modelos plus size en sus emporios de ropa, verlas de este modo ha traido a la mesa la posibilidad del regreso de las tallas 00 al mercado.
Khloé recientemente lanzó un bodysuit que pretende amoldarse al cuerpo, mientras lo sujeta cómodamente sin embargo, ante los usuarios, este parece comprimir “demasiado”.
Desde siempre hemos definimos la belleza a través de las tallas y aunque por un momento parecía que el movimiento body positive estaba enalteciendo los cuerpos reales, terminó desviándose en muchos sentidos.
La gente a menudo no se da cuenta de que el aspecto o la imagen de una persona que vemos en redes sociales puede ser manipulada y esto puede llevar al espectador a tener impresiones o expectativas irreales de sí mismos, pensando que para estar ahí, deben verse igual.
Dejen de hacer “bromas” con el regreso de la talla 00, realmente es algo muy peligroso, seamos concientes que un cuerpo NO es un “trend”
— Aniiiiiis 🥮 (@aniiiisball) September 24, 2022
El movimiento aesthetic que hemos visto en los últimos años en plataformas como TikTok e Instagram ha contribuido a esto, presentando outifts compuestos principalmente por pantalones a la cadera extra grandes y tops cortos que visualmente reducen la cintura. Y coincidencia o no, desde que Kim apareció con su nueva imagen, muchas otras celebridades lo han replicado.
Adoptamos las tendencias de forma casi inconsciente y aunque de principio pueden hacernos cuestionar qué estamos siguiendo, terminamos normalizándolas incluso si implican riesgos.
Cuando por fin muchas se comenzaban a sentir cómodas con su cuerpo, viene la nueva tendencia de talla 00
— Jennifer Amundarain (@_Jenniferjose) September 21, 2022
Esto ha generado debate entre hasta dónde estamos emitiendo opiniones no solicitadas sobre cuerpos ajenos y hasta dónde estamos normalizando cambios tan drásticos que pueden ser riesgosos y la vuelta de las tallas reducidas.
En redes sociales, mujeres hablan del miedo a que regresen los cuerpos reducidos como moda y con ello, los trastornos alimeticios
Literal uno batalla contra los TCA para que pongan de moda otra vez la talla 00
— shortcake ♡ (@wmzppp) September 22, 2022
Que miedo que se ponga de moda pesar 40kilos
— 𝙩𝙖𝙢𝙖𝙜𝙤𝙩𝙘𝙝𝙞 (@tatatamzzz) September 21, 2022
Es que como persona que fue adolescente en los 2000 y lleva lidiando con un TCA desde entonces tengo pánico ahora mismo porque estoy esforzándome mucho por no tener una recaída y ya no hay duda de que la presión por la delgadez en los próximos tiempos va a petar again, qué mal. pic.twitter.com/ft3W0zudcN
— ❤️🔥 Elena Rue Morgue ❤️🔥 (@Elenaruemorgue) September 22, 2022
amiguis, qué onda con la imposición por ser talla 00. Ni volviendo a nacer entraría en esa talla. Que se vuelva moda sentirte cómoda con tu cuerpo y ponerte ropa que te haga sentir toda preciosa diosa inalcanzable
— Melissa AG (@melissaayala92) September 22, 2022
Muchas mujeres son genéticamente delgadas, otras han trabajado para reducir tallas por salud y otras mantienen ciertas medidas a través de una vida balanceada. Ser delgada no está mal, el problema es cuando se convierte en una meta, un final para ser aceptado, una moda que transmite el mensaje erróneo.
Porque entonces surgen figuras públicas que utilizan sus plataformas y alcance para dar consejos, hablar de dietas mágicas, mostrar entrenamientos extremos y vender productos milagro para obtener esa nueva silueta. Nada nuevo claro, porque siempre ha sucedido pero las plataformas cada vez son más inmediatas, al alcance de más personas.
Hablar de los cuerpos y la salud siempre será delicado pero es un hecho que no debemos seguir alimentando las tendencias con base a reducir tallas para vernos aesthetic y encajar. Ni las tallas ni el peso son una medida para definir la salud de una persona y mucho menos su valor o belleza.