Desde hace más de dos décadas Naciones Unidas junto a otros organismos internacionales han luchado por la equidad de género y la igual de oportunidades para las mujeres.
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Desde 1975, cuando Ciudad de México fue la sede de la primera conferencia mundial sobre la mujer, hasta 1995 en Beijing, el objetivo ha sido el mismo: reducir la brecha que deja atrás a las mujeres en términos económicos, políticos y sociales.
La cuarta conferencia realizada en 1995 marcó un parteaguas para las mujeres y fue un punto importante para poner en los ojos del mundo una agenda en pro de la igualdad de género.
¿Por qué es importante la conferencia de Beijing?
La Cuarta Conferencia Mundial sobre la mujer, celebrada en 1995, logró una asistencia sin precedentes, más de 17 mil personas participantes y 30 mil activistas se dieron cita en Beijing para participar en la inauguración.
Tras dos semanas de debates, los representantes de los 189 países que asistieron lograron firmar compromisos históricos que marcaron un plan progresista para promover los derechos de la mujer.
En esta reunión histórica se puso especial atención a 12 esferas en las que, de acuerdo a lo plasmado en la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, representarían un verdadero empoderamiento de las mujeres y avances reales en la lucha por la igualdad de derechos.
Fue en esta declaración en la que los países participantes señalaron que «Los derechos de la mujer son derechos humanos. La igualdad de derechos, de oportunidades y de acceso a los recursos, la distribución equitativa entre hombres y mujeres de las responsabilidades respecto de la familia y una asociación armonía entre ellos son indispensables para su bienestar y el de su familia, así como para la consolidación de la democracia».
12 esferas de especial preocupación
Dentro del documento emitido por ONU Mujeres se establecen 12 puntos en los que los 189 países se comprometieron a trabajar y cuyo seguimiento garantizará el desarrollo de las mujeres en el mundo.
Trabajar en estas 12 esferas representaría una mayor igualdad y oportunidades para las mujeres lo que se traduciría en un cambio real en las condiciones en las que viven mujeres, hombres, niñas y niños alrededor del mundo.
La mujer y la pobreza
De acuerdo con ONU Mujeres, cuando se vive en situaciones de pobreza las mujeres son doblemente discriminadas, no solo por su género, también por su situación económica.
Empoderar a las mujeres a nivel económico contribuye a darles voz. Llevar a cabo programas de capacitación, préstamos para emprender y educación reduce la brecha entre hombres y mujeres.
Educación y capacitación de la mujer
La educación es un arma fundamental para lograr la igualdad, impulsar a las mujeres a que se conviertan en líderes de cambio es una de las claves para mejorar sus condiciones.
Aunque ha habido grandes avances respecto a décadas anteriores, aún hay mucho trabajo por hacer; las mujeres educadas se convierten en agentes de cambio que ayudan a que la economía, la salud y la nutrición mejoren.
La mujer y la salud
La salud de las mujeres es otro de los focos que se plantearon en la conferencia de Beijing, pues para poder desarrollar todo el potencial es necesario que las mujeres tengan acceso a una buena alimentación, a medicina preventiva, anticonceptivos y una vida libre de violencia.
ONU Mujeres también contempla el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia, a detener prácticas que ponen en peligro a las mujeres y las niñas, como el matrimonio infantil y la ablación genital femenina, por mencionar algunos aspectos.
La violencia contra la mujer
La pandemia ha evidenciado y recrudecido la violencia hacia las mujeres. Urge trabajar en erradicarla a través de leyes concretas que pongan fin a la violencia doméstica.
ONU Mujeres estima que antes de la pandemia la violencia hacia las mujeres había alcanzado niveles preocupantes. Pues en 2019, 243 millones de mujeres y niñas fueron víctimas de violencia por parte de sus compañeros sentimentales, mientras que menos del 40 por ciento de las víctimas buscó ayuda.
La mujer y los conflictos armados
Ante los conflictos armados las mujeres y las niñas son las más vulnerables, pues además de que estos eventos destruyen familias, la violencia de género a menudo se utiliza como táctica de guerra.
Además de la falta de participación en las mesas de los negociadores cuando hay un conflicto sigue siendo casi nula.
La economía
Pese a que las mujeres contribuyen al desarrollo económico de manera significativa, la discriminación de género las orilla a desempeñarse en empleos no seguros y mal pagados. La participación de las mujeres en puestos directivos sigue siendo baja respecto a los hombres.
Alrededor del mundo las mujeres ganan entre un diez y un 30 por ciento menos que los hombres por realizar el mismo trabajo.
Las mujeres en la política
Otro de los puntos de la conferencia de Beijing estuvo centrado en la participación de la mujer en puestos de liderazgo y toma de decisiones.
Naciones Unidas trabaja para garantizar que en las elecciones se respeten los derechos de las mujeres, incluido el derecho a votar y a defender sus candidaturas electorales sin sufrir violencia.
Los derechos humanos de la mujer
Los derechos humanos de la mujer
Las mujeres y las niñas tienen derecho a disfrutar de sus derechos humanos plena y equitativamente. ONU Mujeres busca que los Estados creen leyes, políticas y planes nacionales que garanticen los derechos de las mujeres y las protejan frente a las violaciones.
El medio ambiente
Algo que para muchos seres humanos es un hecho como el acceso al agua, para muchas mujeres no es una realidad. En el mundo las mujeres tienen que caminar distancias largas para poder acceder junto a sus familias al vital líquido.
La protección de las niñas
En el mundo las niñas son uno de los grupos más vulnerables, viven abuso sexual, mutilación y ablación femenina, planchado de senos, matrimonio infantil, violencia y discriminación.
Uno de los objetivos de la ONU es que las niñas del mundo puedan vivir una vida plena, libres de violencias por lo que buscan que los gobiernos y las sociedades trabajen en conjunto para promover la educación, la salud y el bienestar de las niñas.
Luego de 20 años hay avances significativos en la lucha de las mujeres por la equidad y la igualdad. Tal como lo señala la ONU: «Cada vez hay más pruebas de que el empoderamiento de las mujeres empodera a la humanidad. Por ejemplo, las economías crecen más rápidamente, y las familias son más saludables y están mejor educadas.».