El príncipe William fue recibido entre aplausos por los palestinos en su primera visita a un campo de refugiados para aprender sobre la vida que llevan estas personas en la peligrosa zona reconocida por la gran cantidad de explosiones que allí se producen.
Luego de reunirse con el líder palestino Mahmoud Abbas en Ramallah, William viajó varias millas de distancia hasta llegar a la zona conocida como el Banco Oeste de Jalazone, para visitar la escuela y clínica de las Naciones Unidas en el lugar.
El campo que abrió por primera vez e 1948 durante la guerra Árabe Israelí ha cambiado de un puñado de tiendas de campaña a edificios de concreto con una vialidad incipiente.
Decenas de jóvenes han esperado en las afueras del centro médico para recibir a tan importante visitante, esperando inmortalizar el momento con sus teléfonos celulares.
A su llegada al lugar, el príncipe William fue recibido entre aplausos y gritos, mientras caminaba por las calles hasta el edificio. Ya dentro de la clínica saludó a un grupo de madres palestinas mientras vacunaban a sus bebés.
Su instinto paterno salió a relucir, ya que el príncipe Louis tiene más o menos la misma edad de estos pequeños. «Son tan pequeños para ser inyectados» expresó mientras un doctor atendía a un bebé.
Más temprano, William de 36 años, hizo historía al visitar las oficinas del líder palestino Mahmoud Abbas y también la escuela para niñas en el campo de las Naciones Unidas.
En el encuentro, Mahmoud Abbas ha dicho al príncipe que espera que en su próxima visita Palestina sea un estado completamente independiente.
