El aislamiento preventivo obligatorio y cómo afecta a nuestra memoria

Muchas personas están sintiendo en este confinamiento una pérdida de memoria o a generar una memoria traumática.

Los días rutinarios, que se desarrollan en un mismo ambiente limitan nuestra capacidad de identificar cómo nutrir nuestra propia línea de tiempo: la memoria episódica.

La memoria episódica se alimenta de contenido e historias.

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Para construirla, el cerebro fracciona eventos que sobresalen de la cotidianidad.

Estas pérdidas podrían estar originadas también por la ansiedad y el estrés y a la vez alimentar estos sentimientos.

la Organización Mundial de la Salud(OMS), alertó de una crisis de salud mental como consecuencia de la pandemia por el nuevo coronavirus.

Según la OMS, el aislamiento social, el confinamiento, el miedo al contagio, las consecuencias económicas y la pérdida de seres queridos traerán una «crisis de salud mental» en todo el mundo.

Por otro, lado, también afectaría a construir recuerdos que acompañarán toda la vida.

Esto lo demostró un estudio de Alejandra Marful, Daniela Paolieri y Teresa Bajo, integrantes del Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento, de la Universidad de Granada, España.

Las investigadoras, declararon a Clarín «memorias de destello».

Estas son un tipo especial de recuerdos que “se construyen alrededor de acontecimientos únicos, sorprendentes y personalmente relevantes».

Las situaciones desafiantes, como las que estamos viviendo, generan el aumento de un neurotransmisor llamado dopamina en el hipocampo del cerebro. 

Esto se suele dar también en un contexto de estrés social.

Por lo tanto, hay un cambio en las conexiones entre el hipocampo y otras zonas del cerebro.

Respecto a cómo liberar esos recuerdos y que queden libres de traumas las doctoras, planteaban soluciones.

«Si queremos recordar una anécdota positiva asociada a esta situación, algo bello ocurrido durante los aplausos desde el balcón, nos vendrán a la memoria muchos aspectos diferentes. Y el esfuerzo por evocar esa anécdota concreta inhibirá el recuerdo de aspectos negativos de nuestro encierro y contribuirá a hacer más positiva nuestra memoria», expusieron.

Asimismo, agregaron que «la evidencia empírica muestra que la mera intención de querer olvidar una información no deseada hace que finalmente» pueda olvidarse.

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