Conforme pasa el tiempo es más complicado que las amistades no se separen. Las responsabilidades de los años traen consigo menos tiempo, más cansancio, y dificultades para coordinar agendas con las personas que antes pasabas todas tus tardes.
Sin embargo, esto no es sentencia de muerte para las amistades fuertes que saben cómo lidiar con los obstáculos. Las mujeres que siempre se dan un espacio para una tarde con amigas, para escucharlas, y para seguir sosteniendo su mano en las buenas y en las malas… lo han entendido todo.
Todo en la vida nos puede fallar; nos pueden despedir de nuestro trabajo, nos pueden engañar, pueden fallecer las personas que amamos, o nos pueden romper el corazón. Pero si cultivamos buenos cimientos en nuestras amistades, tendremos un salvavidas que nos resguarde por siempre.
Muchas veces por estos mismos problemas que nos trae el día a día, damos por sentada las amistades. Creemos que el tiempo protegerá de los descuidos del futuro, pero no siempre es así. Es muy fácil que los caminos se separen cuando no inviertes tiempo en una relación.
Los amigos son la familia que nosotros elegimos, por eso hay que cuidarla como tal. Es necesario en todo momento valorar los buenos momentos, los malos, y aquellos que nos dan aprendizaje. Cuida a tus amigos, y tendrás cómplices para toda la vida.
Asimismo, no hay mejor forma para no enloquecer que haciendo catarsis en una tarde de amigas. ¿No lo crees?
Te recomendamos en video:
This browser does not support the video element.