Si eres de los que está padeciendo insomnio durante la cuarentena, esto puede ser ocasionado por muchos factores. Sin embargo, hacer unas modificaciones en tu menú te hará rendirte más fácil a los brazos de Morfeo.
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La buena calidad del sueño está relacionada a otros hábitos para mantenerse saludable, como son hacer ejercicios y llevar una alimentación saludable, por lo que si estás faltando a esto, tu cuerpo puede verse afectado.
Algunas consecuencias de esta carencia son déficits cognitivos, ansiedad, depresión, problemas de hipertensión y diabetes.
La solución para la cuarentena
Para mejorar el bienestar en la almohada comienza por incorporar a tu dieta cereales integrales ya que son ricos en triptófano, «un aminoácido decisivo en la creación de serotonina, un neurotransmisor que hace que el cerebro funcione correctamente, y melatonina, un neurotransmisor que influye decisivamente en los procesos de sueño y vigilia», explicó la nutricionista Clara Antúnez, para La Vanguardia.
En la nutrición, para lograr estos efectos, también se busca la producción de serotonina, asociada con el control del sueño y la sensación de relajación, ocasionado por los alimentos ricos en magnesio y zinc.
Estos componentes los encontrarás en el pescado azul, un vaso de leche caliente, queso, yogur, frutos secos, bananas, cerezas, dátiles, yuca, garbanzos, el pavo, remolacha y la miel.
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Las cenas con muchas calorías y el consumo de estimulantes durante las últimas horas del día, como café, chocolate y té, dificultan el proceso de conciliar el sueño.
Se recomienda terminar de cenar entre dos y tres horas antes de dormir y tampoco hagas ejercicios vigorosos cercana a la hora de cerrar los ojos para el siguiente día.
Asimismo apóyate en otras buenas prácticas como alejarte de las pantallas de los aparatos electrónicos antes de dormir, establecer unos horarios regulares de sueño, no duermas siestas y aprende a gestionar el estrés.
