Así es como puedes sanar heridas de un amor pasado cuando estás en una relación

Las rupturas duelen y a veces, aunque pase el tiempo, siguen atormentándonos. No importa si has aprendido a estar por tu cuenta o si has entrado en una nueva relación, por alguna razón, sigue una pequeña parte de eso que te dolió tanto.

Es entonces cuando se presentan los problemas para sentirte bien en una nueva relación o pensar siquiera en adentrarte a una. Terminas proyectando lo que pasó con la otra persona, tienes miedo de volver a caer en lo negativo y por tanto, te proteges del dolor y desilusión. ¿Cómo sanar entonces?

Sí, las relaciones nos ayudan a crecer, pero también son una de las principales razones por las que experimentamos dolor emocional en la vida. Nuestra curación comienza con la conciencia y la aceptación, debemos aprender a darnos permiso de amar y ser amadas para que el miedo no nos controle y termine arruinando todo.

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Otro aspecto de la curación es que proviene de reconocer y cambiar las formas en que hemos estado protegiendo la herida. Algunos ejemplos de las formas de protección son la agresión, la agresión pasiva, la crítica, la arrogancia, la falta de autenticidad, los secretos, las mentiras, la infidelidad y el verter energía, tiempo y dinero en distracciones e incluso adicciones.

Ámate a ti misma como lo harías con cualquier otra persona.

Presta atención a tus propias necesidades. Todo lo que necesitas para encontrar el equilibrio y vivir de todo corazón ya está en ti. Las pistas saldrán como sentimientos, susurros y pensamientos de los que no puedes deshacerte. Presta atención a tu intuición y sabrás lo que necesitas. No la ignores. Si eres alguien que ha sido ignorada durante toda tu vida, aquí es donde puedes ponerte de pie y darte el amor que mereces.

Abraza tus sentimientos.

No niegues lo que sientes ni te encierres en un caparazón. intenta confiar en tu capacidad para sostenerte a pesar de todo lo que estás sintiendo. La única forma de lidiar con los sentimientos es abrazarlos. Existen por una buena razón y contienen información sobre lo que necesitas o la dirección que debes tomar. Concéntrate en el aquí y el ahora. Piensa que hay muchas personas que te aman y que están dispuestas a hacerte feliz. Cuanto más empujes tus sentimientos, más daño te harán, endurecerán tu armadura, te endurecerán y deslizarán tu capacidad para conectarte. Deja que los sentimientos se desarrollen, siéntelos y confía en que estarás bien.

Tus vulnerabilidades son hermosas. No las escondas.

Hay partes de todos nosotros que son tan suaves, tiernas y crudas que la tentación es esconderlas para protegerlas. Son las cosas en las que piensas a las 2am, los sentimientos que sientes que nadie sabe, tus inseguridades, tus miedos. Son las partes frágiles de ti y tendría sentido ocultarlas si estuvieras en un entorno hostil o poco favorable, pero ahora estás en uno diferente. Deje que su pareja los vea, no los cubra con ira, negación o simulación.

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