Los límites son importantes dentro de todo matrimonio y más aún si eres recién casado y vos comenzando esta nueva etapa en tu vida. Y es que los límites matrimoniales son saludables, ayudan a tener una relación sana, que pueda crecer y ser fructífera.
Los límites matrimoniales saludables vienen en muchas formas, tamaños y colores. Realmente, es importante que cada pareja decida cuál es el que funciona para ellos. Te presentamos los más esenciales:
Debes ser tú misma
Algunas personas, cuando están casadas, se vuelven menos sí mismos, pierden aspectos de su personalidad. Muchas personas adoptan las amistades de sus cónyuges, sus pasatiempos y sus formas de hacer. Cada relación sana se basa en la verdad, y si pretendes ser es algo distinto de tu verdadero yo, el matrimonio nunca será realmente saludable.
Más flexible y menos rígida
Es importante que todos sean flexibles en una relación. Es importante trabajar con tu pareja para que ambos puedan vivir una vida que sea auténtica para ambos. Apégate a la flexibilidad y no seas tan rígida. Elije las cosas que son importantes para ti y mantente fiel a ella.
Prevalecer el respeto mutuo
Uno de los mayores límites que nunca deben faltar en un matrimonio es el respeto mutuo. La falta de este valor puede ser el asesino del romance en un matrimonio.
La regla oro: Respétense mutuamente dentro de los límites de su relación hablándose con honestidad y compartiendo sus sentimientos y necesidades de manera abierta. A no atacarse física o verbalmente y criticar los comportamientos y acciones de los demás.
Mantener el poder parejo
En muchos matrimonios, sucede que, en algún momento, una persona se convierte en la que realiza todas las decisiones. Y mientras esto parece funcionar en un nivel, en última instancia, la relación se volverá desigual. Y cuando las dinámicas de poder son desiguales, un matrimonio puede cambiar.
