Caminar es una de las actividades básicas de nuestra vida. Indispensable para llevar una vida saludable, ya que con tan solo caminar un par de cuadras o calles estarás ejercitándote de forma natural. Pero caminar demasiado lento puede significar problemas futuros de salud.
Hasta ahora, no ha habido una forma ideal para que los médicos midan la velocidad caminar, ya que se trataría también de evaluar el entorno de la persona como el pavimento de las calles en las que se desenvuelve y las demandas de su atención como el tráfico, otros peatones y cruces de calles.
En un nuevo estudio, los investigadores evaluaron formas de medir las tareas de caminata complejas para aprender más sobre los cambios sutiles y tempranos en la marcha. Su estudio fue publicado en el Diario de la Sociedad Americana de Geriatría, reseñó Medical Xpress.
Lo que significa para tu salud caminar lento
En el estudio, los participantes caminaron por diferentes caminos y se les dieron varios desafíos diferentes para medir su velocidad de caminar y su capacidad para hacer frente a las tareas físicas y mentales al mismo tiempo. Luego, los investigadores siguieron con los participantes cada seis meses para ver si tenían alguna dificultad para caminar un cuarto de milla debido a un problema de salud o físico.
Los participantes reportaron cualquier problema de movilidad o discapacidad cada año en visitas en persona. Al final del seguimiento de ocho años, más de la mitad de los participantes habían desarrollado una discapacidad de movilidad, lo que significa que no podían caminar un cuarto de milla. Casi el 40% había desarrollado una discapacidad crónica de movilidad que duró al menos dos años.
Los participantes que informaron tener discapacidades de movilidad eran más propensos a ser mujeres, tener diabetes, ser obesos, tener dolor en la rodilla y experimentar dificultad para respirar. También tenían más síntomas de depresión.
Los investigadores concluyeron que la velocidad de la marcha lenta en condiciones tanto de ritmo habitual como complejas se asoció con un mayor riesgo de desarrollar discapacidad de movilidad en los próximos ocho años.