Wellness

Así es como puedes sanar tu alma tras sufrir un evento traumático

Aunque no lo creas, sanar es posible (y necesario)

Definir un trauma es más complicado de lo que cualquiera creería. No solamente es el hecho de sentir miedo o ansiedad ante un evento inesperado o difícil de asimilar sino una serie de situaciones que nos llevan a paralizarnos por días, meses o incluso años.

PUBLICIDAD

Todos los seres humanos sufrimos traumas a lo largo de nuestras vidas y muchas veces ni siquiera tiene que ser un evento importante, entendido como «traumático», como lo es una gran pérdida, un accidente o exposición a una situación de riesgo.

Todo se trata de cómo manejamos nuestras emociones por ello, las noticias sobre acontecimientos perturbadores en el mundo y el estrés  nuestras propias vidas y el de nuestros seres queridos son capaces de convertirse en un trauma. que puede ser desde un leve «shock» que pasa en unos días hasta algo que nos paraliza por años.

Cada vez que sientes una emoción aterradora o impactante, los haces de neuronas que se han conectado se disparan juntos, poniéndonos en «modo seguro» a través de un bloqueo o negación. Otras veces puede venir una gran ansiedad junto con un miedo tan intenso que desencadena el mecanismo de lucha o huida.

Con el tiempo, esto se vuelve agotador, cayendo incluso en un estado de paranoia o depresión. Aunque puede parecerte imposible, es importante hacer algo para superar esas respuestas negativas ante el trauma.

Habla con alguien de confianza sobre lo que pasó.

Hablar con familiares, amigos o tu pareja puede ser bueno. El apoyo y la comprensión en un momento difícil pueden ser muy útiles. No tienes que enfrentarlo sola. Si no encuentras esa confianza en ellos, puedes recurrir a un terapeuta con el que te sientas cómoda.

Abraza tus emociones

Saber que lo que siente es muy normal para alguien que ha pasado por un evento traumático. Es importante enfrentar situaciones asociadas con el evento traumático pero hazlo gradualmente. Esto es un proceso y no debes permitir presionarte ni que nadie lo haga. Si dejaste de ir a trabajar, puedes regresar, aunque al principio sea solo por unas horas y luego regresar poco a poco a la rutina. Lo importante es que estés consciente de lo que sientes para entonces entender cómo enfrentar tu miedo.

Date tiempo 

Acepta que puedes tardar un poco en ajustarte. Debes saber que la forma en que se siente no durará, y al lidiar con los miedos y pensamientos, podrá seguir adelante con la vida. Sé amable contigo misma. Pasa tiempo haciendo cosas bonitas que te traigan paz: medita, da un paseo, baila, visita lugares hermosos, ve a esos amigos que te reconfortan. Haz un plan para llevar a cabo todos los días algo que te ponga en tu «lugar feliz».

Uso de medicamentos

JAMÁS recurras a drogas o alcohol para «manejar2 el dolor. Eso sólo lo empeorará y pondrá en riesgo tu salud. Lo mejor es que si sientes que estás demasiado ansiosa o triste, veas a un especialista que te ofrezca una terapia y te recete los medicamentos adecuados para ayudarte. Algunos antidepresivos pueden ser útiles para tratar el trastorno de estrés postraumático. Las benzodiazepinas, como el Valium, pueden aliviar temporalmente sus síntomas, pero son adictivas y terminarás necesitando dosis mayores para obtener el mismo efecto. Por eso es importante que ante todo, lo hagas de la mano de un especialista. No se recomiendan para uso a largo plazo.

Te recomendamos en video

Tags

Lo Último