La grasa abdominal es una de las más difíciles de eliminar y, por ende, es la que menos nos gusta en nuestro cuerpo.
El aumento de la grasa abdominal no solo dificulta subirse el cierre de los pantalones. Las investigaciones demuestran que la grasa abdominal también provoca riesgos graves para la salud. ¿La buena noticia? Las amenazas que presenta la grasa abdominal pueden reducirse.
Te presentamos tres tés que, además de darte calor, te ayudarán a deshacerte de los “cauchitos” de más y que traen de cabeza. Tómalos en ayunas y a quemar grasa de una manera dulce y efectiva.
1) Canela y miel
Ingredientes:
– 1 cucharada de canela en polvo
– 1 cuchara de miel
– Jugo de 1 limón
– 1 trozo de jengibre
Preparación:
Pon a hervir una taza de agua. Ya que hierva, agrega todos los ingredientes y deja que hierva por 15 minutos más. Retira del fuego y deja reposar por diez minutos.
2) Laurel y salvia
Ingredientes:
– 5 hojas de laurel
– 1 manojo de hojas de salvia
– 1 ramita de canela
– 1 litro de agua
Preparación:
Pon a hervir el litro de agua, agrega los ingredientes y deja que hierva otros diez minutos. Retira del fuego, cuela y deja reposar por 15 minutos.
3) Perejil
Ingredientes:
– 5 cucharadas de perejil picado
– 1 litro de agua
Preparación:
Pon a hervir el agua, ya que hierva, agrega el perejil y revuelve por un par de minutos y retira del fuego. Tapa, deja reposar por 15 minutos, cuela y listo.
Te ofrecemos otros prácticos consejos que te ayudarán a reducir la grasa abdominal:
– Sigue una dieta saludable. Aumenta el consumo de alimentos de origen vegetal, como frutas, vegetales y cereales integrales, y elige fuentes magras de proteínas y productos lácteos con bajo contenido de grasa.
– Reemplaza las bebidas azucaradas. En cambio, bebe agua o bebidas con edulcorante artificial.
– Incorpora la actividad física a tu rutina diaria. Los expertos recomiendan practicar una actividad aeróbica moderada, como caminar a paso ligero, durante al menos 150 minutos por semana, o una actividad aeróbica intensa, como trotar, durante al menos 75 minutos por semana.