Quienes escuchan tus dudas y problemas suelen ser los amigos. Aunque hablar contigo misma puede ser igual o más gratificante y esclarecedor, cuando necesitas comprender aspectos de tu vida y hallarles solución.
Un estudio publicado en la revista Procedia – Social and Behavioral Sciences, reveló que hablar contigo misma puede ser motivador en los momentos de más ansiedad y estrés.
Esto fue probado al analizar el rendimiento de 187 estudiantes, jugadores de baloncesto. Las charlas motivacionales a solas, con ellos mismos, mejoraron su desempeño en la cancha.
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Ethan Kross, psicólogo y profesor de la Universidad de Michigan, también refuerza y apoya esta conclusión: “El lenguaje nos proporciona esta herramienta para distanciarnos de nuestras propias experiencias cuando reflexionamos sobre nuestras vidas. Y esa es la razón por la que es útil (hablar contigo misma)”, explicó a The New York Times.
Hablar contigo misma y ser más objetiva
Hablar contigo misma te permite ver las cosas de tu vida de una forma más objetiva, indica el especialista.
En el estudio Self-Talk as a Regulatory Mechanism: How You Do It Matters, publicado en el Journal of Personality and Social Psychology, Kross y ocho colegas más, analizaron el impacto de hablar contigo mismo, en tu mente, para ver cómo esta acción afecta las actitudes y sentimientos.
Fue entonces cuando comprobaron que cuando los sujetos que participaron en el estudio hablaban en segunda o tercera persona, en voz alta, sintieron menos ansiedad al realizar aquellas tareas que los inquietaban.
De acuerdo al informe, esto se debe a la “autodistanciación”: hablar de ti desde la distancia.
«En términos de por qué la distancia psicológica ayuda, el ejemplo que me gusta es pensar en un momento en que un amigo o un ser querido reflexiona sobre un problema», dijo Kross.
Siempre es más fácil dar consejos a los amigos porque no eres tú el que está padeciendo, explicó el especialista. Entonces, al hablar contigo misma en voz alta y en tercera persona, al aconsejarte, sentirás que es otro al que estás aconsejando y sentirás más calma al resolver los problemas.
Otros beneficios de hablar contigo misma
- Felicitarte a ti misma cuando tienes un logro.
- Motivarte cuando tienes un tropiezo.
- Debatir los beneficios y consecuencias de una decisión difícil.
- Afrontar de buena manera los sentimientos y sensaciones que no te agradan.
- Entender mejor tus pensamientos y sacudir de tu camino el estrés y ansiedad.