Cuando una mujer recurre a un método anticonceptivo, la ligadura de trompas es el más popular. Sin embargo, son varios los riesgos a los que se exponen cuando deciden atravesar este procedimiento quirúrgico, incluso las consecuencias que esto deja en su organismo.
Acá te enumeramos los cuatro más graves de ligarte las trompas:
1.- Puedes arrepentirte: puedes tomar la idea repentina de pasar por esta operación sin pensar bien, solo como un impulso para no tener más hijos o evitar tenerlos de plano pero, con el tiempo, tu pensamiento puede cambiar. En unos años puede que desees tener un hijo y ya tu organismo no esté apto, así que debes estar cien por ciento segura para hacerlo.
2.- No puede ser del todo efectiva: es probable que salgas embarazada luego del procedimiento, a pesar de ya sentirte libre de poder concebir un hijo así que lo mejor que puedes hacer para evitarlo es consultar a tu médico y preguntarle si puedes seguir con tu tratamiento anticonceptivo.
3.- Efectos psicológicos: puedes sentirte culpable al optar por este método. Quizás al principio sientas un alivio pero luego hay pacientes que presentan cuadros de depresión, ansiedad y hasta estrés en sus relaciones sexuales. Todo esto depende del estado emocional de cada mujer.
4.- Efectos secundarios: mal funcionamiento de los ovarios, trastornos menstruales, alteración en los cólicos menstruales, infección, hemorragia, reacción negativa a la anestesia.