Mucho se ha escrito sobre el amor, pero sigue siendo un misterio. Enamorarse y no ser correspondido sigue siendo algo que nos marca la vida. La ciencia tiene una explicación.
El psicólogo Roy Baumeister explica que esta situación es una condición inevitable del ser humano y explica las razones por las que sucede tan comúnmente.
«Tendemos a idealizar a las personas y desear lo que es imposible, pues nuestro cerebro percibe lo imposible como un ‘objeto de lujo’, por eso cuando nos enamoramos no siempre es de la persona correcta, sino de la que cubre nuestros criterios inconscientes, sin importar si nos conviene o no», explica.
Muchas relaciones terminan complicándonos la vida, sobre todo si se trata del chico al que hemos idealizado. Muchas veces el personaje no se parece en nada a lo que imaginamos.
De allí nacen sentimientos como la culpa y hasta el deseo de ser distinto para agradar al otro. Muchas veces te das cuenta que estás en una relación que no es tan ideal.
Si no se toma la decisión de cortar por lo sano a tiempo, es muy probable que termines en una relación codependiente y que te cause dolor y tristeza.
Si estás en una relación con estas características, es mejor que pienses en ti primero y aunque duela es necesario decir adiós y dejar a un lado el sufrimiento.
