Wellness

¿Cómo evitar que las frustraciones se apoderen de mi vida?

La escritora Paola Beléndez nos enseña a entregarnos a la vida tal y como es para evitar frustraciones y poder encontrar la liberación

Comienzo con esta frase de Eckhart Tolle: «Es solamente cuando oponemos resistencia a lo que sucede que quedamos a merced de los sucesos y entonces es el mundo el que determina si hemos de ser felices o infelices».

PUBLICIDAD

Lo hemos oído una y otra vez… «Lo que resistes, persiste». Y es que en verdad lo hemos vivido en carne propia tantas veces, y lo he visto en los demás una tantas más.

Nuestra cabeza esta construida de todos aquellos juicios que hemos aprendido a hacer acerca de la vida, con cientos de cajones en dónde acomodar las cosas. Hay cosas que nos gustan y cosas que no nos gustan. Y con «cosas» me refiero a emociones, personas, situaciones, escenarios, pero sobre todo, facetas de nosotros mismos que hemos aprendido a negar, a rechazar y a esconder.

Por eso los budistas insisten tanto en dejar los apegos y las AVERSIONES. Sin embargo, cuando nos enfrentamos a aquello que «no nos gusta», o, muy comúnmente, a algo que nos hace salirnos de nuestra zona de confort, algo que nos orilla al cambio,  nuestra reacción primera es rechazar, negar y RESISTIRNOS a esto que en nuestra cabeza, y ciertamente, para nuestro ego, esta «mal».

       DESCUBRE MÁS:

  1. El poder sanador de las lágrimas
  2. 8 frases de Gandhi sobre la vida que te harán reflexionar
  3. ¿Cómo luchar contra el ego para que no se apodere de tu vida?

 

Recuerdo cuando al fin llegó el maravilloso hombre que había pedido al Universo para formar mi familia y estaba haciendo los planes para mi boda, una inmensa resistencia se apoderó sobre mi, algo de mi moriría, algo estaba a punto de cambiar. Cuando regresé de luna de miel, esa resistencia, por no decir, miedo, se apodero aún más de mi. Me llegaban a la cabeza cientos de imágenes de mujeres sumisas, frustradas y desdichadas. Lo que mas temía era al cautiverio, a terminar en una jaula de oro, después de haber encontrado tanta libertad. Esta resistencia a entregarme a mi nueva etapa como «esposa», como pareja, a esta nueva etapa que iba mas allá de mi propio egoísmo me empezó a volver loca una vez más, causando una gran cantidad de dolor, ansiedad e infelicidad. Me estaba resistiendo profundamente a lo que ERA, sin importar si lo que ERA, era mi gran sueño, aquello que yo había tan fervientemente pedido por 28 años.

Mi cabeza proclamaba en tono solemne, «nunca seré ama de casa, NUNCA», y mientras solemnemente mantreaba la frase que causaba toda mi incomodidad, mis tripas se retorcían y veía en la cara de mi amado, a mi futuro carcelero. Por eso dicen que tenemos la enorme capacidad de hacer del cielo un verdadero infierno», pero bueno, ¿a dónde voy con todo esto?

Estoy segura que a ti te ha pasado algo similar, con tu jefe, con tu familia, incluso contigo misma. Estoy segura que conoces a la prisión a la que me refiero, esos pensamientos recurrentes que te hacen segregar bilis… tanto quisieras que las cosas fueran distintas. Y así quería yo que sucediera, mi santa voluntad, sin darme cuenta, que la liberación estaba tan, pero tan cerca de mi; tan solo tenía que soltar, entregarme a lo que la vida me estaba dando en ese momento: una casa que transformar en hogar, a un hombre increíble y a un bebito que cuidar en mi barriga. De pronto, sin darme cuenta, en el momento en el que dejé de buscar afuera y dejé de desear que las cosas cambiaran me encontré, feliz, iluminada y radiante cantando con un trapo en la mano, ¿qué importaba dónde estuviera?, ¿qué importaba si mi ego tenía mas grandes e importantes sueños para mi? En ese momento era la ama de casa mas feliz del mundo -y no por ser ama de casa- en ese estado de presencia y aceptación me había liberado por completo y podía disfrutar plenamente de la vida y de lo que tenía que ofrecer.

Como este caso, podría citarles cientos más, pero mejor los dejo con un consejo de corazón: si te encuentras frustrado, enojado con tu vida, con tu cuerpo, con tu forma de ser, con alguna emoción que no quieres sentir, con alguien a quien no quieres ver, solamente, por un día, ofrece aceptar las cosas tal y como son. Si estas enojado, acéptalo, permítete estar enojado, no te culpes por eso. Si quieres controlar y cambiar a tu pareja porque crees que al hacerlo las cosas serán mejores, sólo por hoy, acepta a tu pareja tal y como es y te sorprenderás. Si ya estas harto de tu trabajo, de tu jefe, de tu mamá, del tráfico, sólo por hoy, trata de experimentar entregarte a la experiencia en aceptación total y ya verás cómo todo cambiará sin que nada en absoluto haya cambiado.

www.paolabelendez.com

Facebook: facebook.com/paolabelendez1111
Twitter: @paolabelendez
Instagram: @paolabelendez

 

Tags

Lo Último