Si este tipo de detalles y terminaciones les parece propio de las jovencitas o sacado de un disfraz de cowboy, la verdad es que no están muy lejos, pero tampoco en lo correcto.
PUBLICIDAD
Los flecos nacieron en el Viejo Oeste, tuvieron su minuto de fulgor en los años 20 con el charleston, y de ahí volvieron en los 70 de forma transversal gracias a los hippies.
¿Pero qué hace que estén nuevamente de regreso? Varias temporadas atrás diferentes casas de moda comenzaron a sacarlos en sus colecciones masculinas, como Yves Saint Laurent. Pero no fue hasta un invierno atrás que Burberry los hizo explotar en la pasarela.
Son un fuerte foco de atención dentro de un look, ya que otorgan movilidad y un aspecto folk inmediatamente. Para los hombres, el saber cómo y con qué usarlo es un desafío, y un riesgo que podría rayar en disfraz de striper.
Inapropiados para cualquier tipo de formalidad, muestra sus virtudes cuando se combinan con prendas básicas que –sin estampados– no compitan con este detalle tan llamativo.
Desde luego una camisa con cuadros, o combinarlo con algún sombrero o cualquier tipo de bota, sería acercarnos a pasos gigantescos a una caricatura cowboy.
Los flecos son un must have del verano. Una propuesta arriesgada para los hombres, pero un gran acierto para quienes se atreven y logran llevarlo de una manera natural, sobria y equilibrada.
PUBLICIDAD
Los flecos son cuestión de actitud. ¿Estarías preparado para usarlos?
Más: Los mejores y los peores looks de las famosas