Nadia Mejía confirmó que el Miss Universo 2025 será el último certamen de belleza en el que participe. Ella visiblemente conmovida, explicó que cerrará un ciclo que le dio aprendizajes, amistades y la oportunidad de inspirar.
Su anuncio no fue un retiro por desilusión, sino una decisión consciente de cerrar una etapa para abrir otras puertas en su vida profesional y personal.
¿Por qué se retira? Más allá de la corona
Mejía, de 29 años, ha dicho públicamente que quiere dedicar más tiempo a sus proyectos personales, como su campaña social “Soy Suficiente”, que nació de su propia historia de recuperación. Ella busca explorar nuevas facetas en la música, la actuación y el activismo.
La decisión también responde a la sensación de haber cumplido su sueño de representar a Ecuador en el escenario más grande de la belleza internacional y hacerlo con autenticidad. Nadia se retira de los certámenes competitivos, más no de la escena pública ni de su labor social.

Lo que distingue a Nadia no es solo su presencia en pasarela, sino su capacidad de contar una historia humana. Al hablar de su recuperación de la anorexia y de cómo transformó esa experiencia en un proyecto para apoyar a jóvenes, dejó una huella real. Ella demuestra que los reinados pueden servir como plataforma para la salud mental y la autoestima.
Las reacciones frente su anuncio fueron inmediatas, medios, fans y colegas mostraron su apoyo y admiración frente a su valentía al elegir el rumbo que es mejor para ella.
Su recorrido en el Miss Universo 2025
Lejos de estar simplemente presente, Nadia Mejía ha brillado con luz propia en este Miss Universo. En el desfile de traje de baño desfiló con un bikini verde que resaltó su figura y su seguridad, demostrando una pasarela firme, elegante y con una fluidez que solo quienes han competido antes pueden proyectar.
Para uno de los días de la recta final del certamen, Nadia apostó por un diseño muy ecuatoriano en uno de sus atuendos más comentados, un vestido hecho con conchas de las playas de Esmeraldas, obra de manos artesanas que unieron naturaleza, identidad y moda para contar una parte de su país al mundo.

¿Y ahora qué sigue para Nadia?
Cerrar esta etapa abre un mapa de posibilidades, desde fortalecer su proyecto social, seguir desarrollando su carrera artística, hasta convertirse en referente para quienes buscan reinventarse.
Nadia ha dicho que quiere usar la experiencia adquirida para inspirar y contar que hay varias formas de brillar. Esa energía positiva y su forma cercana de comunicarse hacen pensar que su cambio de rumbo será igual de vibrante que su paso por las pasarelas.
Una invitación para las nuevas generaciones
La despedida de Nadia llega como una invitación para quienes sueñan con los certámenes porque participar puede transformar, pero no define toda una vida.

Su mensaje es esperanzador y práctico: compite si quieres, aprende, crece y, cuando llegue el momento, atrévete a reinventarte sin miedo. Así, su adiós a las competencias se convierte en el inicio de nuevas formas de influencia positiva.

