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Es momento de dejar de cuestionar a las víctimas que “liberan” a sus agresores

YosStop salió de prisión luego de que se reclasificara su delito de pornografía infantil a discriminación pero las críticas ahora están sobre Ainara

Yoseline Hoffman (YosStop), fue detenida el pasado mes de julio y vinculada a proceso por el delito de pornografía infantil. Fue la joven Ainara S. quien desde marzo la denunció por haber almacenado un video en el que se ve cómo es agredida sexualmente por otros sujetos durante una fiesta.

“Estoy muy feliz porque ya estoy libre”, dijo la influencer al salir del reclusorio en donde estuvo cinco meses. Hoffman recuperó su libertad luego de que un juez reclasificara el delito de pornografía infantil a discriminación, por lo que no amerita cumplir una condena en prisión.

Tras la denuncia de Ainara, las autoridades capitalinas detuvieron a la influencer para ser ingresa en el penal de Santa Martha Acatitla, al sur de la Ciudad de México. Ahora, tendrá que cumplir una serie de condiciones para seguir con su condena en libertad lo que incluye una disculpa pública y el pago de una cantidad económica para la afectada, así lo informó la Fiscalía de la Ciudad de México ha informado de que se autorizó por tres años la suspensión condicional del proceso penal en contra de Hoffman.

El acuerdo también implica no contactar a la víctima, así como capacitarse en el tema de víctimas de violencia de género para entonces publicar un video cada mes en el que comparta el contenido al respecto. Así mismo, no expresarse de forma denigrante, insultante y humillante hacia cualquier persona y deberá donar el 5% de sus ingresos a asociaciones o colectivas.

Pero mientras que lo que hizo Yoseline Hoffman sigue siendo inaceptable, las redes sociales se han volcado contra Ainara, cuestionando su credibilidad de víctima.

Puro show de una supuesta víctima”. “...los que juraban que Ainara quería justicia real. Su “justicia” se hizo a base de muchos ceros a la derecha”. “La tipa esa sólo se aprovechó del nombre y la fama de Yoss”. “La chava solo quería dinero lo dejo muy claro en diversas ocasiones, solo se colgó de un buen movimiento. No entiendo como todavía la apoyan”, se lee en redes sociales.

Aunque Hoffman no transmitió el video, admitió tenerlo en su celular, además de que para crear su video crítica, describió lo sucedido, llamó despectivamente a Ainara y la culpó por ello en repetidas ocasiones.

Los hechos ocurrieron en 2018 cuando Ainara S. de entonces 16 años, acudió a una fiesta en la consumió bebidas alcohólicas, perdiendo el sentido de lo que sucedía. Cuatro hombres que estaban presentes, se aprovecharon del estado de la adolescente para introducirle una botella de champagne en la vagina.

El peligro de callar, reír o ser indiferente ante un acto que violenta la integridad de una persona es normalizar la violencia, revictimiza y resta la urgencia por tomar acción frente a las denuncias.

El que Ainara haya llegado a un acuerdo con Yosseline no resta la gravedad de sus acciones.

YosStop hizo un video dando su opinión del caso, llamándola de forma denigrante en repetidas ocasiones. Pero lo que parecía “un contenido más” en su canal, terminó siendo parte de un problema por el cual México ocupa los primeros lugares en el mundo: la difusión de pornografía infantil.

Algo similar ocurrió con la influencer Nath Campos, quien tras denunciar al youtuber Rix por abuso sexual, terminó llegando a un acuerdo para que este saliera de prisión. Al igual que YosStop, él también tendrá que reparar los daños bajo ciertas condiciones.

Lo sucedido causó gran indignación en redes sociales pues muchos no podían creer la facilidad con la que un agresor se sigue saliendo con la suya. Algunos incluso aseveraron que personas como Nath sólo quieren llamar la atención

Si algo hay que recordar con ambos casos es que el agresor sigue siendo culpable.

Tampoco hay que decir que «no sirvió de nada» y que «por eso las mujeres no denuncian». Tanto Ainara como Nath demuestran lo importante que es alzar la voz para exigir justicia por ellas, por las que aún no han podido hacerlo y por las que ya no están.

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