Cuando la mujer llega al cuarto piso es importante que adopte nuevas rutinas de vida diaria para que su cuerpo, su piel y su vida en general se mantengas bellas y saludables. Si quieres mantener la firmeza, tonicidad y suavidad de tu rostro es necesario realizar ciertas rutinas que te ayudarán a obtener el objetivo y hacerles frente a los efectos de la edad.
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En este período la hidratación es clave, a diario aplica productos en tu rostro que te humecten tu rostro, recuerda adquirir los adecuados para tu tipo de piel.
La limpieza facial también debe ser parte de tu rutina, tanto al levantarte como al acostarte lava tu rostro con abundante agua y jabón. Recuerda que no debes ir a dormir nunca con maquillaje, pues ese acto envejece la piel.
Mascarillas complemento ideal de tu rutina
Las mascarillas faciales le dan un plus al cuidado de tu rostro. Serán una gran ayuda para las mujeres que llegan a edades maduras, pues complementan la rutina de belleza. La clave está en seleccionar la mascarilla adecuada a tu tipo de piel. Bien sea caseras o comerciales las mascarillas contienen por lo general aceites esenciales que le dan a tu rostro una hidratación profunda. Entre otros beneficios de las mascarillas para el rostro tenemos:
Refuerzan una rutina habitual de limpiadores, geles y sueros.
Revitalizan la piel apagada y ayudan a la recuperación de la salud del rostro.
Te permite disfrutar de un momento de relax en el tiempo de aplicación.
Estimulan la circulación sanguínea.
Mejora de manera integral el tono de la dermis.
Lograrás una piel con un brillo salud y apariencia fresca.
Te ayudarán a hidratar, remover el exceso de grasa y mejorar la apariencia de los poros.
Extrae impurezas y disminuye los signos del envejecimiento.
Aunque las mascarillas requieren tiempo en su proceso de aplicación, valdrá la pena invertir ese tiempo, pues te ayudará a regenerar y proteger la piel de tu cara, hay mascarillas sencillas de hacer que no significan mucho esfuerzo. Te dejamos la receta de 3 mascarillas caseras ideales si tienes 40
Antes de aplicar una mascarilla
Limpia bien la piel de tu rostro, no debe tener nada de maquillaje, es buena idea limpiar con jabón neutro o de glicerina o un gel exfoliante.
Las mascarillas caseras deben realizarse y aplicarse ese día, no se guardan pues con sus ingredientes naturales pueden dañarse. Considera esto a la hora de prepararlo.
No coloques la mascarilla en el contorno de tus ojos, esta zona sencilla necesita de otros cuidados.
Cuando utilices mascarillas con vinagre de manzana o de limón evita el son para que no sufras irritaciones en el rostro.
Mascarilla nutritiva de naranja y miel
Ingredientes:
2 cucharadas de jugo de naranja
2 cucharadas de leche
2 cucharadas de miel
Modo de preparación
Mezcla los tres ingredientes en un envase seco y limpio. Al lograr una crema homogénea aplícala en tu rostro con pequeños masajes. Deja actuar por unos 15 minutos. Pasado el tiempo enjuaga con abundante agua fría. Los efectos de una mejor piel son inmediatos.
Mascarilla antiarrugas de tomate
Ingredientes:
1 tomate maduro
Modo de preparación
Toma el tomate y córtalo en 4 partes iguales. Frótalo en tu rostro con movimientos circulares suaves. Deja el ingrediente en el rostro durante 40 minutos, pasado el tiempo elimina el tomate con abundante agua. En varias semanas tu piel estará más firme.
Mascarilla de aceite de bebé y aguacate
½ aguacate bien maduro
2 cucharadas de aceite de bebés
Modo de preparación
Tritura el aguacate y agrégale el aceite de bebé, una vez mezclado aplica en el rostro limpio y seco y déjalo reposar por 30 minutos. Verás cómo tu piel se hidratará. Al pasar los 30 minutos retira la mezcla con agua tibia.
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