Una técnica que se ha vuelto popular para darle más luz al rostro y resaltar sus atributos es el contouring.
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“Contouring es la aplicación estratégica del corrector o base de maquillaje en un tono más oscuro que el tono natural de tu piel. Dichas técnicas de aplicación crean sombras y dibujan áreas de la estructura facial”, explican en el portal Adore Beauty.
Es una forma de alcanzar pómulos más prominentes y sensuales, una nariz más fina y una mandíbula más definida. También puedes conseguir una forma de cara más alargada o delgada, todo depende de cómo ejecutes la técnica.
Cómo aplicar el contouring perfecto
Necesitarás
Corrector y base 1 tono más claro y 1 tono más oscuro que el tono de tu piel
Esponja
Iluminador
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Polvo traslúcido
Por lo general, se aplica el tono más claro de corrector en las siguientes áreas: el inicio de la frente, debajo de los ojos, el puente de la naríz, el mentón y en la zona baja de las mejillas.
Con el corrector más oscuro harás el ‘contouring’ para darle mayor intensidad y profundidad a tus rasgos. Las áreas más comunes son los lados de la nariz, la línea de la mandíbula, los huecos en las mejillas y el perímetro de la frente.
Para aplicar el contouring necesitarás varios pinceles a la mano: un pincel plano, un cepillo en ángulo, y una esponja.
No existe un solo estilo de contouring, puedes hacerlo más intenso o más ligero dependiendo si vas a una reunión casual o formal, en el día o en la noche.