Bimba Bosé siempre tuvo un estilo especial, diferente, superando cualquier límite de lo alternativo. Comenzó su carrera como modelo el año 2000 y se convirtió en todo un ícono en España y el mundo.
Esta mañana despertamos con la noticia de su muerte tras dos años de lucha contra el cáncer de mama. Con solo 41 años Bimba deja este plano donde dictó líneas estilísticas que representan a una mujer fuerte y libre que vestía, se veía y hablaba como quería.
Nacida como Eleonora Salvatore, la hija del torero Luis Miguel Dominguín y de la actriz Lucía Bosé, siempre estuvo ligada a lo artístico he ahí su estilo particular y andrógino.
Es justamente este detalle que le daba un look ambiguo, el que la diferenciaba antes que esta corriente se hiciera popular en la moda.
El modelaje fue una de sus principales ocupaciones alcanzando un lugar privilegiado en el mundo de la moda, tanto así que fue fotografíada por grandes artistas como Mario Testino y Steven Meisel. Apareció en Vogue y Harper’s Bazaar, entre otras muchas revistas de papel couché. Además, desfiló en las pasarelas más importantes como Madrid, Milán y Nueva York.
Uno de sus mayores reconocimientos en la moda fue haber sido la musa del exitoso diseñador español David Delfín, con quien compartía la lucha contra el cáncer. Delfín ha debido convivir con tumores cerebrales al mismo tiempo que Bimba se sometía a la mastectomía de su seno izquierdo.
“Es más que mi musa, es mi todo”, comentó el diseñador David Delfín en una entrevista.
Bimba también se encontraba trabajando como DJ, y fue abiertamente seguidora del genio musical David Bowie de quien tomaba ideas tanto estéticas como musicales. Y claro, todos recordamos cuando en 2007 grabó junto a su tío Miguel Bosé el single “Como un lobo” del disco Papito.
Recordamos así a una mujer que venció los estereotipos presentándose libre y radical frente a la sociedad española y mundial.