Por Francisca Cafati De Giorgis
Estás buscando la forma de mejorar la apariencia de tu piel, pero no quieres recurrir a técnicas invasivas. En ese caso, la solución son los tratamientos cosméticos que ayudan a lucir un rostro joven y lozano en sólo minutos. Cuando se trata de renovar y regenerar la epidermis, el ácido glicólico se convierte en el rey indiscutido. «Tiene dos funciones muy importantes; una netamente estética, que tiene que ver con la exfoliación e hidratación, dejando la piel suave y luminosa, y otra que es mucho más relevante, que es la capacidad por estímulo externo de rejuvenecer y revitalizar la piel, aportando más oxígeno y nutrientes», afirma la reconocida cosmetóloga María Olga Estrada. Es un compuesto tan versátil que sirve para tratar diversos problemas cutáneos, como manchas, arrugas o acné. No en vano se ha convertido en uno de los ingredientes predilectos de la cosmética y dermoestética.
Pertenece a la familia de los Alfa Hidróxido Ácido (AHA), un grupo de ácidos presente en varios productos naturales que han sido sintetizados en laboratorios para su uso comercial. El ácido glicólico en particular fue descubierto en los años 80 por los doctores Eugene Van Scott y Ruey Yu, se extrae de la caña de azúcar y es altamente soluble en agua.
Por ser un excelente exfoliante y humectante natural, la gran mayoría de las marcas de belleza lo han incluido en sus fórmulas como uno de sus principios activos. También es muy apetecido para peeling profesionales, ya que penetra profundamente en la piel y ayuda a desprender las capas de células muertas que se acumulan en la superficie, mejorando significativamente la apariencia y textura. «Cuando hacemos un peeling con ácido glicólico en consulta, estamos exfoliando, hidratando desde la profundidad, oxigenando y acelerando todos los recursos de defensa de la piel para que ésta se mantenga activa y vital», agrega María Olga. La especialista también comenta que después de varias sesiones se produce un proceso de rejuvenecimiento que sorprende por sus resultados. Al mismo tiempo destaca que después de peeling es muy importante continuar el tratamiento a diario en la casa, porque así mantienes la piel activa y radiante.
El nivel de concentración determinará la adecuada aplicación que debe tener este ingrediente; en cosméticos se suele usar entre el 15% y el 20% de concentración, aunque para pieles sensibles el porcentaje debería ser menor. En peeling profesionales se suelen usar concentraciones del 50% al 70%, auqnue en este caso es fundamental que sea aplicado por un especialista. No hay que olvidar que es un ácido y, por tanto, a mayor concentración más agresivo será. Es el médico o cosmetóloga quien –según una evaluación individual– debe definir la dosis óptima para cada persona. En las dosis justas sus efectos son muy beneficiosos para el rostro, cuello, escote y manos, en realidad, para cualquier zona del cuerpo que requiera un «refresh» profundo.
GRANDES BENEFICIOS
El ácido glicólico actúa como un gran agente exfoliante, destruyendo lo que mantiene a la piel muerta pegada a la superficie de la piel sana, acelerando su eliminación y estimulando el ciclo de renovación celular de la epidermis. Además, elimina manchas producidas por el sol, el envejecimiento, el acné severo, atenúa líneas de expresión (frente y comisura de los labios), restaura la fibra en los tejidos de la piel dañada por el acné, cicatrizando heridas y borrándolas. En resumen, mejora la salud y apariencia de la piel.
La doctora Mónica Ross, dermatóloga de Clínica Avansalud, destaca que «es un producto muy amigable, posee muy pocos efectos secundarios y son perfectamente tratables». El enrojecimiento es la principal molestia que se puede presentar con este tipo de tratamiento, pero en general no suele durar más de 24 horas; también se puede experimentar un ardor leve en el momento de la aplicación, y la piel tratada puede oscurecerse. Cuanto mayor sea la concentración, más posibilidades de que se produzcan estos efectos. Por eso la dermatóloga advierte que es imprescindible aplicarlo con moderación y siempre bajo supervisión de un especialista. «Se debe usar poca cantidad, en la concentración adecuada y no más de 5 a 10 minutos. Es el médico quien debe observar cuidadosamente la piel; si se pone roja significa que ya atravesó la membrana basal, ya hizo su efecto y debe lavarse de inmediato», explica la doctora Ross.
El número de sesiones del tratamiento en cabina depende de cada caso, y en general varía entre tres a seis. El especialista es quien debe indicar la cantidad y frecuencia. Pero mientras mayor sea la concentración con que se aplique, más tiempo debemos esperar entre una sesión y otra; con un peeling de 50% a 70% lo ideal es esperar al menos 30 días. No hay que olvidar que es esencial el mantenimiento en la casa con productos tópicos, como crema o gel.
«El ácido glicólico sólo trae beneficios en la medida que haya una previa evaluación, un diagnóstico adecuado, se aplique bien y sobre todo se retire bien», concluye la cosmetóloga María Olga Estrada.
BELLAS VENTAJAS
* Exfolia suavemente, eliminando células muertas y regenerando la piel.
* Quita manchas producidas por el sol, el envejecimiento, el acné severo, etcétera.
* Elimina líneas de expresión, como las líneas de la frente, la comisura de los labios, etcétera.
* Trata el acné, restaurando la fibra en los tejidos de la piel dañada, cicatrizando heridas y borrándolas.
* Humecta y mantiene fresca la piel, evitando su envejecimiento prematuro, dando luminosidad a los rostros apagados.
* Protege el colágeno y la elastina de la piel.
OTROS AHA CONOCIDOS
* Ácido Láctico: se obtiene de la leche.
* Ácido Cítrico: proviene de las frutas cítricas, como la naranja o el limón.
* Ácido Málico: se obtiene de verduras y frutas, como membrillos, manzanas, peras y uvas.
* Ácido Tartárico: se extrae de las uvas.
PRECAUCIONES BÁSICAS
* Luego de un peeling con ácido glicólico la hidratación es fundamental.
* La primera vez conviene hacer primero una prueba de sensibilidad para evitar posibles complicaciones.
* El consejo es comenzar aplicando el producto en baja concentración e incrementarla poco a poco.
* Es esencial dar un tiempo de reposo entre aplicación y aplicación. Los peelings de ácido glicólico con baja concentración (20%) pueden hacerse una vez por semana.
* Está totalmente contraindicado el sol y los rayos UVA. El uso de un filtro solar es obligatorio a diario.
* No se debe hacer en pieles con heridas, acné pustuloso o herpes.
* Mientras se realiza el tratamiento de ácido glicólico no se debe aplicar ningún exfoliante ni cremas que contengan retinol