¿Recuerdas cuando eras pequeña y esperabas la hora de dormir para que tus papás te contaran un cuento? Quizá te aprendiste de memoria la historia de ‘Caperucita Roja’ o ‘Los tres cochinitos’ o quizá fuiste de las que escucharon el libro entero de Harry Potter de la voz de mamá o algún adulto que lo leía mientras escuchabas con atención.
Ahora que eres mamá, debes saber que leer cuentos a los más pequeños es una parte importante de su desarrollo intelectual y emocional.
Se trata de un momento de encuentro entre tu y tu pequeño. Es una forma de crear una conexión única que recordará cuando crezca y que seguramente aplicará con los suyos.Es importante que los cuentos que le leas a los pequeños sean entretenidos, de diversas temáticas y sobre todo, que tengan un mensaje positivo o que los haga pensar e imaginar. A continuación te explicamos los principales beneficios de esta especial práctica.
Recomendados
Cómo educar a tu hija para que crezca con responsabilidad afectiva
5 claves que debes poner en práctica con tu hijo para que sea todo un caballero
6 maneras de inspirarle confianza a tus hijos
Potencia la imaginación
Leer cuentos a tu hijos ayuda a que creen nuevos espacios en su mente y que se imaginen y transporten a otros mundos. No importa si son escenarios ficticios pues es una forma de entender la realidad. Es una ruptura de la rigidez mental, a través del juego.
Aumenta su creatividad
Cuando los niños son expuestos a un cuento, se introducen en mundo mágico del que se sienten partícipes. De este modo, se involucran en la historia e interpretan lo escrito para entender lo que pasa. Esto le ayudará a expresarse con mayor fluidez y encontrar soluciones a los problemas que enfrente en la vida.
Aprende valores
Los cuentos suelen tener enseñanzas que le servirán a tu hijo para poder educarse como persona. Cuando le lees un cuento, le ayudas a identificar los buenos valores como la amistad, la generosidad, la amabilidad y la compasión para ser aplicados en la vida real. Esto ayudará a que mejoren su comportamiento y se relacionen con otros niños.
Mejora su memoria
A través de imágenes, palabras, historias o frases, tu hijo aprende a relacionar y representar cualquier cosa con la ayuda de un símbolo (simbolización). Cuando leemos cuentos a los más pequeños favorecemos que generen imágenes en su mente relacionadas con las historias que contamos, es decir, que sean capaces de simbolizar, dar forma a las palabras y recordar secuencias. Un gran ejercicio es preguntarle durante la lectura cosas que ya hayas leído o que te recuerden qué pasó en el capítulo anterior.
Comprensión de emociones
Le ayuda a descubrir sus propias emociones, a combatir sus temores viendo solucionar situaciones difíciles a sus protagonistas, conociendo e identificando sus miedos como algo normal (y superable) en otros niños de su edad.