Recientemente en Universal Studios de California, Estados Unidos, un personaje famoso y la alegría contagiosa de la cumbia ecuatoriana se combinaron para crear un instante viral que emocionó a miles.
La protagonista fue la creadora de contenido Vivi Ponce, quien con paciencia y una sonrisa logró que el icónico Grinch se moviera al compás de “Solo tú”, de Don Medardo y sus Players, además del tema de salsa choke titulado “A lo Pelotero” de Dj Faricho; un homenaje a la música popular ecuatoriana que hoy suena más lejos que nunca.
De la tradición a la pantalla
Don Medardo y sus Players, icono de la cumbia andina y tropical del país, llevan décadas construyendo repertorios que conectan con distintas generaciones.
Que una pieza de ese legado suene en un parque temático estadounidense y acompañe la improvisada coreografía del Grinch es la muestra de cómo la identidad cultural se transporta y se adapta en manos de sus propios portadores, en este caso, una ecuatoriana que vive fuera del país.
El video, compartido por Vivi Ponce en sus redes sociales, se expandió con rapidez, logrando que usuarios celebraran el gesto y la comunidad ecuatoriana en el exterior comentara con emoción y nostalgia. En apenas horas, la pieza se convirtió en símbolo de orgullo y un recordatorio de que la música popular puede ser puente entre culturas en días festivos.
Detrás de la escena
Según los relatos de Vivi, antes de hacer bailar al Grinch, esperó alrededor de dos horas; cuando el momento del encuentro finalmente llegó, se acercó con respeto y habló en español al personaje hasta lograr una interacción divertida.
El resultado fue un Grinch que habló en español, se dejó llevar por la cumbia y regaló un pequeño instante de complicidad con la creadora de contenido, que luego compartió la experiencia con su comunidad. Ese tipo de encuentros, sencillos pero humanos, son los que hacen que una canción recobre vida en nuevos escenarios.
Impacto para la música ecuatoriana
La viralización de este video y el gesto de Vivi, reaviva la curiosidad internacional por la cumbia ecuatoriana y por Don Medardo, su legado y su discografía. Para artistas y gestores culturales, momentos así abren puertas para difundir repertorios tradicionales en audiencias que tal vez nunca habían escuchado esos ritmos.
Si algo deja esta historia es una invitación clara a seguir contando y mostrando nuestras músicas con confianza. Que la cumbia de Don Medardo prendiera a un personaje en Universal Studios es motivo para que músicos, promotores y comunidades se animen a compartir su cultura en redes, festivales y encuentros internacionales.
Vivi Ponce mostró que, con cariño y autenticidad, una canción se puede llevar nuestra tierra a cualquier rincón del mundo, y en este caso, hacer bailar hasta al Grinch.