¿Probaste alguna vez a hacer tu propia crema pastelera?
PUBLICIDAD
La crema pastelera está presente en muchas facturas, tortas o pasteles.

Te vamos a dar los tips para elaborar tu propia crema pastelera, según la web recetasderechupete.
Ingredientes
- 500 ml. de leche entera
- 4 yemas (de huevos XL)
- 125 g. de azúcar blanco
- 50 g. de fécula o almidón de maíz
- 1 vaina de vainilla
- La piel de un limón (también puede ser una naranja)
- Manteca (opcional)
Preparación de la leche aromatizada
- Comienza por la vaina de vainilla. Dale un corte a lo largo, ábrela y retira con un cuchillo las semillas del interior
- A continuación, lava el limón y pela la piel finamente, sin que lleve parte blanca. En función de gustos, puedes usar mayor o menor cantidad de piel, ya que el sabor del limón a muchos os puede resultar cargante.
- De la leche, separa 150 ml. en una taza. Incluso si quieres que quede un poco más sabrosa le puedes añadir un toque de nata, con un chorrito es suficiente.
- El resto lo puedes calentar en un cazo, a fuego medio. Cuando esté a punto de hervir, pero que no llegue a hacerlo, retira del fuego.
- Añade la vainilla, la piel del limón y deja infusionar unos 30 minutos, con el cazo tapado. Mientras, infusiona la leche vamos a mezclar el almidón o harina de maíz.
- Disuélvela en la taza de leche, removiendo bien, para que no queden grumos. Reserva.
Preparación de la crema pastelera
- En primer lugar, en una cacerola pequeña, añade las yemas de los huevos y poco a poco echa el azúcar, removiendo sin parar con unas varillas para que no se pegue.
- A continuación vierte la leche con la harina o almidón de maíz (Maicena). Sigue removiendo, para que se haga una mezcla bien homogénea y sin grumos.
- Pasado el tiempo de infusionado y reposo añade a la cacerola la leche infusionada, colándola y de paso separando la vainilla y la piel del limón.
- Ahora, ve echando poco a poco y mezclando al mismo tiempo. Pon a fuego medio-bajo (4 en escala de 1 a 10) y comienza a remover sin parar, poco a poco y sin prisas.
- Al principio cuesta un poco pero luego irás comprobando cómo va tomando textura la crema y se va espesando. Sigue removiendo y de repente, cuando tenga la temperatura ideal notarás como espesa y adquiere esa textura tan suave y reconocible cualquier crema pastelera.
- Luego, retira del fuego y pasa la crema a un bowl o jarra de cristal, así no adquirirá ningún sabor del recipiente.
- Deja atemperar y luego reserva tapada con un film transparente en la heladera, hasta el momento de su uso.
¡Lista! ¿Viste que sencillo?