Ahorrar energía es una forma efectiva de ayudar a la conservación del medioambiente, pero también de cuidar nuestros bolsillos. Existen trucos muy sencillos para hacerlo en nuestro hogar, uno de ellos es tener conciencia del consumo de nuestros artefactos.
Y aunque creamos que tenemos todo controlado porque están apagados, un informe de la Agencia Internacional de la Energía (IEA) revela que mientras estén conectados siguen consumiendo energía.
Este organismo internacional advierte que los aparatos eléctricos que siguen conectados, en modo de espera o ‘stanby’, consumen entre un 5 y un 10% del total de la energía de toda la casa. Una cifra alarmante y costosa.
Por ello, los expertos recomiendan desconectar los artefactos que no estés usando y que obviamente no afecten el funcionamiento de tu hogar. Prueba desconectando los más pequeños y que menos utilices en tu rutina para ahorrar energía sin mucho esfuerzo.
Los más consumidores
Te sorprenderá saber cuáles equipos están incluidos en esta lista, que podría darte pistad de cuáles debes desconectar para ahorrar energía. La encabezan los decodificadores, módems o cajas de televisión, pues apagados, pero no desconectados, consumen hasta 43,4 watts (w).
Las computadoras de mesa pueden llegar a consumir hasta 73,9 w si solo apagas la pantalla. Mientras que la laptops alcanzan hasta 8.9 w por hora apagadas, si la dejas suspendida o en modo “durmiente” este promedio se eleva hasta 15,7 w.
Algo tan común como dejar la puerta abierta del microondas genera un consumo de 25 w, cuando el promedio es de 3,8 watts. El equipo de sonido llega hasta 8,4 w, pero si el tuyo tiene luces, relojes o cualquier otra función extra podría alcanzar hasta los 14,4 w.
