¿Hasta dónde puede llegar un ser humano? Es la pregunta que todos nos formulamos ante el insólito caso de Zholia Alemi. Esta mujer del Reino Unido laboró durante 22 años como psiquiatra y, tras una investigación legal contra ella, descubrieron que no culminó el primer año de medicina.
PUBLICIDAD
Lo más impresionante del caso es que no siempre trabajó de forma independiente, ya que reconocidas instituciones creyeron en sus dotes profesionales. Incluso, en 1995 ingresó al Servicio Nacional de Salud Británico. Pero su «ética» se fundió cuando quiso estafar a uno de sus tantos pacientes.
Zholia Alemi intentó cambiar el testamento de un paciente con evidentes inconvenientes mentales. La idea de la «psiquiatra» era alterar el contenido para quedarse con la herencia. De acuerdo a Soy Carmín, la situación la expuso a una investigación donde se analizaron todos los pacientes que atendió durante 22 años. El objetivo era conocer si causó otros daños.
Lo más lamentable es que las autoridades manejan la posibilidad de que haya recetado fármacos no aptos. Lo mismo sucede con las terapias que haya ordenado. El Servicio Nacional de Salud aseguraron sentir vergüenza ante el caso y afirman una investigación exhaustiva sobre cómo violó los pasos para llegar a su posición actual.
«Pedimos disculpas por las angustias que se puedan haber causado. Le aconsejamos a los pacientes que fueron tratados por esta mujer que se comuniquen con nuestro equipo de servicios», expresaron a la ciudadanía.