No hay nada peor que una suegra metiche, y cuando se quiere entrometer en los asuntos de tus hijos, la situación empeora.
Esto es lo que vivió una mujer en Estados Unidos al enterarse que su suegra le cambió el nombre a su bebé mientras ella se encontraba dormida por la cesárea.
Lo peor del caso es que la mujer se dio cuenta dos meses después de lo sucedido, y por supuesto su reacción fue de enojo tanto con ella como con su esposo.
En la columna Consejos de crianza de Slate, la mujer confesó todo lo que vivió y cómo lo enfrentó.
“Mi hijo tiene 2 meses y acabo de descubrir que mi suegra, confabulada con mi esposo, escribió el nombre de nuestro hijo como «Finlay» en lugar de «Finley» en toda su documentación legal. Yo, por supuesto, estoy furiosa, porque ya habíamos acordado el nombre”, dijo la indignada mujer.
Además, la suegra envió un regalo de Navidad con el nombre ‘Finlay’, sabiendo que ella aun no conocía que le habían cambiado el nombre a su hijo.
“Cuando le pregunté a mi esposo que por qué había escrito el nombre del bebé así ni siquiera tuvo la decencia de decírmelo. Simplemente me dejó creer durante dos meses que el nombre de nuestro hijo se escribía como «Finley» cuando legalmente no lo es”.
Y también contó cómo descubrió que le habían cambiado el nombre a su bebé. “Descubrí todo esto cuando fui a buscar su tarjeta de Seguro Social y su certificado de nacimiento para archivarlos correctamente. Mi esposo me dijo que se arrepintió tan pronto como llegó la tarjeta y tuvo miedo de decírmelo”.
Ella cuenta que la madre de su esposo “lo obligó” a hacerlo cuando ella estaba dormida tras su cesárea.
“Desde hace mucho ella había tratado de convencerlo porque decía que odiaba el nombre que yo había elegido. Piensa que Finlay es más masculino que Finley. Lo que más me molesta es que le haya dicho que me enojaría, pero lo superaría”.
Y también dejó en claro que su suegra le faltó el respeto con esta acción y que ya está realizando el proceso para cambiar el nombre de su hijo legalmente.
