Los gatos son curiosos, criaturas espontáneas con actitud y descaro como ningún otro animal. Saberlos es amarlos, e incluso si te calificas a ti mismo como un amante de los gatos, es posible que no sepas todo sobre el tipo felino.
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Aquí hay 5 cosas particulares e interesantes que debes saber sobre los felinos si piensas tenerlo como mascota.
A algunos gatos les gusta el agua
El angora turco es una de las antiguas razas de gatos domesticados, conocida por su cuerpo elegante y orejas puntiagudas. Esta raza es naturalmente atraída por el agua y algunas incluso han sido reportadas como nadando o vadeando en piscinas de la misma. Hay algunas otras razas que se conocen como el agua, tales como: American Shorthair, Maine Coon, American Bobtail y Turkish Van.
Los gatos son manipuladores, cuando necesitan ser
Todo el mundo sabe que cuando un gato tiene hambre, no se pasearán por eso. Te frotarán, te pisarán y algunos incluso podrían maullar en la parte superior de sus pulmones. Si bien esto puede parecer algo así como una llamada de auxilio, los gatos practican este comportamiento para manipular a sus dueños para obtener lo que desean: ¡comida!
Los gatos sueñan igual que nosotros
Si un gato está lo suficientemente relajado y ha entrado en un sueño profundo, sus pequeñas mentes producen los mismos patrones de ondas cerebrales que nosotros enviamos a la tierra de los sueños. ¡Tal vez el gatito pueda atrapar a esa ardilla molesta de verdad esta vez!
Los gatos pueden enfermarse por comer chocolate al igual que los perros
Normalmente, los gatos no pueden tolerar el chocolate y el consumo puede causar que se pongan muy enfermos. Los gatos son carnívoros por naturaleza y no les gustan las cosas dulces. Sin embargo, asegúrate de tener cuidado al dejarlo afuera para que Kitty no lo encuentre.
Tienen la capacidad de tolerar muy bien el calor a pesar del pelaje.
Los gatos domesticados son todos descendientes de sus antepasados, grandes felinos, muchos de los cuales se pueden encontrar en entornos desérticos hace siglos. Debido a esto, los gatos pueden tolerar bien las altas temperaturas y jadear para refrescarse. (Incluso tienen la capacidad de sudar, ¡a través de las almohadillas en la parte inferior de sus pies!)