Primero comenzó como un hobbie, como una actividad para realizar en los ratos libres. También como una ocupación para que la madre de Óscar y Maximiliano Vázquez pudiera distraerse en casa.
Pero los muebles que ellos construían se fueron acumulando en el patio de la residencia en Pirque, así que tuvieron que pensar en soluciones.
A la gente que los visitaba les gustaba los diseños, sobre todo el hecho de que estuvieran construidos con pallets en desuso, así que decidieron venderlos.
Comenzaron con casas para perros teniendo en cuenta que en Pirque casi todos tienen mascotas, pero el emprendimiento tuvo más éxito del que esperaban y luego debieron fabricar también muebles y juguetes.
Así, estos dos hermanos además de Francisca Mayr, novia de Óscar, recolentan los pallets desechados por sus vecinos o bien por empresas del sector. Luego los desarman y les hacen tratamiento; ellos además buscan que su proyecto sea sustentable y ecológico así que reciclan y reutilzan hasta los clavos y tornillos que traen las maderas.
“Esto ha sido un acierto. A los tres nos gusta trabajar con las manos y nos pone más contentos si podemos ayudar en algo con la sustentabilidad; además vivimos en una comuna súper sustentable”, explica Óscar.
Estos tres jóvenes profesionales aceptan pedidos a través de su página en Facebook “El Rincón del Pallet”. También realizan despachos pagando un pequeño monto.
