El trabajo que realizan los activistas de Greenpeace no es para nada fácil e incluso puede ser muy arriesgado. El 19 de septiembre de 2013 un grupo de 30 activistas abordo del Arctic Sunrise fueron detenidos por defender pacíficamente el ártico de la empresa Gazprom, que quería extraer petróleo en el Polo Norte.
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Luego de varios meses, los activistas de distintas latitudes fueron puestos en libertad por el gobierno Ruso, sin embargo, el buque rompehielos Arctic Sunrise fue liberado recientemente, siendo retenido por más de 9 meses.
“En primer lugar, el Arctic Sunrise nunca debió ser detenido. No había absolutamente ninguna justificación para que fuera abordado, arraigado y mantenido durante tanto tiempo en Murmansk, más aún, el Tribunal Internacional del Derecho del Mar ordenó su libertad inmediata en noviembre de 2013″, aseguró la ONG de forma oficial.
Puedes conocer más de esta iniciativa de Greenpeace en Save The Arctic.org.
