Lamentablemente nos estamos perdiendo de miles de estrellas que iluminan la noche. En mi casa (y tengo suerte) puedo ver un poco dónde está la Vía Láctea, pero en las grandes ciudades, con mucha suerte se pueden ver 2 o quizás 3 estrellas en la noche, debido a la gran cantidad de luz artificial, tanto de los faros, los carteles, las casas comerciales. Nos estamos perdiendo de la oscuridad.
Si alguna vez tienen la suerte de estar en el campo, el bosque o en la playa, lejos de la ciudad, aprovechen la oportunidad de mirar al cielo y contemplar las estrellas. No las miren, contémplenlas, llénense de su belleza, de su luz natural, de su silencio.
En el desierto de Atacama, en Chile, se encuentran los cielos más limpios del mundo, por lo que el Observatorio Europeo Austral (ESO) decidió tener su base en ese lugar, y han compartido algunas fotos espectaculares de lo que noche a noche pueden ver.
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No gastemos más luz de la necesaria, no es necesario tener prendidas la televisión, el computador y la radio. A veces es bueno desconectarse un rato de la tecnología y conectarse con uno mismo y la naturaleza.
