Hay quienes prefieren los postres a base de frutas y quienes se inclinan más por los pasteles llenos de crema. Encontré esta genial combinación entre los dos, que me pareció una muy buena opción para un picnic o una fiesta en el jardín, o simplemente el cumpleaños de alguien que esté a dieta o sea intolerante al gluten.
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La idea es cortar una sandía de manera a que quede como un tambor, la forma que tendría un pastel, cubrirlo con crema chantilly y decorarlo con otras frutas.
Escoge las otras frutas por su color: kiwis, moras, piña, ¿qué tal frutos estrella? Puedes cortarlas con cortadores de galletas para darles forma, o hacer bolitas con una cuchara parisina. Evita usar frutas que se oxidarán como manzanas y plátanos.
También puedes agregar almendras o nueces, uvas pasa, o tu cereal favorito. El coco rallado podría darle también un buen toque, o quizá unas gotas de yogur de las que se usan para acompañar helados.
Utiliza palillos para detener las frutas que estén a los lados y puedan caerse, sólo no olvides retirarlos antes de servir la sandía a niños pequeños.
En todo caso lucirá muchísimo y sorprenderá a todos al momento de cortarlo. ¡Disfruta!