¿Cuál es la calidad de las comidas que niños y niñas ingieren en sus escuelas? ¿Comerán más frutas y verduras quienes reciben un plato con estos alimentos? Una preocupación que el Ministerio de Agricultura de Estados Unidos llevó a partir de un estudio en el que se revisó si las nuevas normas de nutrición se están cumpliendo.
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Estados Unidos es uno de los países con los índices de obesidad más alta en su población, por lo cual cada medida que se toma es con el fin de contribuir a una mejor salud y calidad de vida, especialmente la referida a los más pequeños. Tales normas disponen que los niños y niñas disfruten de frutas y verduras en sus menús de la escuela, norma especialmente potenciada para el periodo 2012-2013.
USDA, United States Department of Agriculture, al no obtener datos actuales, tomó los del año 2005 de aquellas escuelas que ya están suscritas a las nuevas normas, y a partir de estos datos realizó algunas conclusiones.
Primero, en aquellas escuelas donde el modelo ya está implementado se ha resuelto que sus estudiantes consumen muchas más verduras que aquellas donde no está hecho el trabajo de cambio de hábitos.
El objetivo de este estudio también pasa por cooperar con los establecimientos que aún no incorporan este cambio, verificar que se estén utilizando las nuevas normas y poder otorgar, efectivamente, alimentación de calidad para las y los estudiantes. En el informe presentado se pueden observar algunas conclusiones que podrían ser irrisorias, como que las niñas consumen más vegetales y frutas de color verde oscuro y anaranjado, y que los niños y niñas con padres exigentes comían menos cantidad de verduras; datos que pueden ser de utilidad para implementar un cambio de alimentación al observar estas conductas.
En su mayoría, las escuelas que se adaptaron a la nueva norma han aumentado el consumo de las frutas y verduras, cuestión que vale la pena se siga replicando en otros países.
Alimentación sana y actividad física v/s sedentarismo
Si bien cabe destacar este avance, es válido detenerse en el tipo de alimentos que se entregan en las escuelas, y que estos sean adecuados para todas y todos los niños, atendiendo a sus diferencias en cuanto a culturas y salud, por ejemplo, que alguno/a sea alérgico a alguna fruta o verdura.
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Son muchos los países que están alertas sobre la alimentación de su población. Más cuando las cadenas de comida rápida siguen en aumento y los habitantes encuentran ahí una oportunidad para comer abundante, con buen sabor y muchas veces más económico que la comida fresca, sana y natural.
La atención también debe estar puesta en la cuota de ejercicios de estos niños y niñas, observando sus niveles de actividad y el tiempo que invierten en hobbies de poco movimiento.
Foto: jose_gonzalvo