Parece absurdo querer trocar la fresca belleza áurea de los árboles por unos artificiales, pero sin duda si su usabilidad conlleva la alimentación de un parque automotriz eléctrico que a su vez reemplace al actual contaminante, podemos encontrarle sentido e incluso aplaudir la idea.
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Neville Mars, un arquitecto holandés, ha creado el proyecto Solar Forest que surtirá de energía extraída gracias a placas fotovoltaica desde el astro rey para cargar los automóviles del futuro que además, podrán encontrar aparcadero sombreado bajo este bosque solar.
Un proyecto que nos recuerda la sustitución de paneles planos por estructuras tridimensionales pueden cambiar significativamente la economía de la generación de energía solar, según los ingenieros, que han creado estructuras que pueden asemejarse a un árbol extrayendo hasta un 20% más que las clásicas estructuras planas.
Sería realmente genial que se pudieran cruzar estas dos iniciativas. Por el momento a seguir soñando con el futuro verde que promete por ejemplo que Singapur se convertirá en un jardín mediante el ambicioso proyecto de “Super árboles”, o que la Torre Eiffel se convierta en un jardín vertical capaz de eliminar 87.8 toneladas de CO2, e incluso si las cosas andan mal, ya exista el árbol de Noé que podría salvar algunas especies en el futuro.
Como vez, puras cosas maravillosas que nos hacen avanzar en la construcción de un imaginario ecológico que se sustente por medio del uso de la tecnología de manera consciente. Y por supuesto, ¡ ADIÓS HIDROCARBUROS!
Fuente: Solar Forest: los bosques del futuro (Diario Ecología)