Lo que primero tengo que hacer con esta receta de salmorejo con bonito marinado es agradecerle la ayuda a mi buen amigo David Monaguillo que fue la persona que me pasó la receta de bonito marinado. El salmorejo, de hecho, ya lo conocíamos, ¿verdad?.
La cuestión es que es una receta muy sencilla de hacer, aunque requiere su tiempo, y que se puede combinar con otras muchas recetas de sopas frías. Por ejemplo el lo hizo con un ajoblanco de altramuces y algunas otras versiones.
Tiempo de elaboración | 24 horas
Dificultad | Fácil
Personas | 6-8
Ingredientes
- 1 kg de bonito (los lomos)
- 1 kilo de sal
- 1 kilo de azúcar
- 1 litro de aceite de oliva virgen extra
- 2 ajos
- Hierbas aromáticas al gusto
- Piel de limón
- 500 g de salmorejo
Cómo hacer salmorejo con bonito marinado
Bien, el salmorejo lo podremos ir haciendo según la receta que os he linkado en los ingredientes y al inicio de esta entrada. Una vez hecho lo dejaremos en la nevera para consumir al día siguiente o dos días que es cuando estará el bonito terminado.
Limpiamos bien los lomos del bonito, si tenéis la suerte de que el pescadero os los saca y limpia genial, si no, con paciencia y buen cuchillo los podéis sacar. Imaginar 4 lomos con unas espinas en cruz, ir siguiendo las espinas poco a poco y así sacaréis los lomos.
Ponemos estos lomos cubiertos con una mezcla de sal y azúcar al 50% durante al menos una hora. Si lo queréis más curado lo podéis dejar más tiempo pero tampoco mucho porque saldrá seco.
Los lomos ya curados, los lavamos bien y los secamos. Los ponemos en un recipiente que cubriremos con aceite de oliva virgen extra los ajos, el limón y las hierbas aromáticas que queramos. Si queremos más potencia de sabor, machacar todas las aromáticas juntas con el ajo. Dejaremos al menos 24 horas.
Consejos y sugerencias
Una vez tengamos terminado nuestro bonito marinado lo sacamos, escurrimos y cortamos en dados. Servimos el salmorejo y terminamos con colocando el bonito encima.
En este caso he servido unas cucharitas con el salmorejo y el bonito, las he decorado con unos brotes. Pero podéis servir como queráis, en platos más grandes o cuencos pequeños y más cantidad.