La mitad de todos los tejidos que se fabrican en el mundo son de algodón y casi todo el resto lo lleva en su composición. La industria del algodón da trabajo a mas de 100 millones de personas, ocupa el 3% de la superficie cultivada en el planeta, consume el 23% de los pesticidas usados y utiliza el 10% de los productos químicos tanto en su cultivo como en su posterior teñido. Teniendo en cuenta estos números, podemos imaginarnos su impacto a nivel económico, social y medioambiental.
Como mencionábamos, aparte de las nefastas consecuencias de cultivar el algodón siguiendo prácticas industriales dependientes de los químicos, el algodón requiere para su posterior teñido un carga de tinturas altamente contaminantes. Si bien el algodón crece de manera natural en colores diferentes al blanco, la aparición de tintes químicos baratos a principios del siglo XX provocaron el abandono de otras especies y la concentración en cultivos de algodón blanco que serán posteriormente teñidos en fábrica (proceso muy barato, con una paleta de colores ilimitada pero con un costo ambiental muy grande).
Si bien la industria ha comenzado a dar un giro y algunas marcas pioneras están prefiriendo algodón proveniente de cultivos orgánicos, con tintes naturales y que practican el comercio justo, aún falta que se masifique esta práctica, para que podamos utilizar prendas amigables con el medio ambiente y con nosotros.
PD: No olvidar que la industria de los plaguicidas ha provocado catástrofes de enormes magnitudes como el desastre de Bophal (India) donde murieron miles de personas en 1984.
Links:
La industria del algodón, uno de los mayores contaminantes del planeta (eco13.net)
El algodón ecológico de colores evita el uso de millones de toneladas de pesticidas (ecoticias.com)